pamplona - El alcalde Enrique Maya tiene previsto ofrecer mañana al consejero de Ordenación del Territorio, Vivienda, Paisaje y Proyectos Estratégicos, José María Aierdi, 6 parcelas municipales que podrían dedicarse a viviendas de protección oficial y evitar de esta manera que siga adelante el proyecto de construcción de casi 200 viviendas de alquiler social en la Ripa de Erripagaña, a lo que se opone Navarra Suma y la plataforma Pro Parque Ripa Sur de Beloso por el valor medioambiental de la zona y la alta densidad de viviendas. Será durante la reunión que ambos mantendrán mañana en el edificio consistorial, después de que en la sesión de trabajo celebrada en el mismo sitio el 22 de enero el equipo de Gobierno municipal no concretara una propuesta alternativa viable. Fue entonces cuando el Gobierno foral tomó la decisión de reactivar el proyecto de Erripagaña, que permanecía paralizado desde octubre tras la prórroga solicitada por el alcalde Maya para ver si se encontraba una alternativa a la de la Ripa de Erripagaña.

Los grupos de la oposición conocieron ayer la iniciativa de Navarra Suma y preguntaron al concejal delegado Juan José Echeverría por los detalles de la propuesta que piensa trasladar al Gobierno foral. Fue durante la Comisión de Urbanismo celebrada por la mañana, donde Echeverría aclaró que las citadas 6 parcelas están situadas en Etxabakoitz Norte, Rochapea, Txantrea y Arrosadía. También dijo que en la reunión con el consejero Aierdi le presentarán un mapa de la ciudad con las parcelas disponibles y anunció su intención de analizar el proyecto en los terrenos de la antigua Super Ser.

Como se recordará, en la mencionada sesión de trabajo celebrada el mes pasado en el Ayuntamiento -a la que acudieron representantes del Gobierno foral, de los grupos municipales y de dos asociaciones vecinales de Erripagaña- las formaciones de la oposición reconocieron que la ripa no es el mejor lugar para construir, pero coincidieron en la necesidad de disponer con urgencia de nuevas viviendas de alquiler social dada la demanda existente.

En este contexto consideraron que plantear nuevas alternativas solo servirá parea retrasar la construcción al menos dos años, un plazo excesivo para Bildu, PSN y Geroa y también para el Gobierno foral. En cualquier caso, si la propuesta de Navarra Suma es aceptada tendrá que tener el apoyo de la mayoría del Pleno.