Foto: mayo de 2021, J.A.S.

Hoy en día los detalles permiten identificar sin ningún género de dudas el mismo escenario de 1930. Eso sí, la zona fue intensamente urbanizada cuando se abrió la calle Errotazar, y en los 91 años transcurridos entre ambas fotos una tupida hiedra ha cubierto buena parte de la fachada.El origen del monasterio Viejo de San Pedro estuvo vinculado a la ermita de San Pedro de Riba, que existía ya para 1230, momento en que se instalaron allí los franciscanos. Y fue en 1247, cuando estos monjes se trasladaron al monasterio que habían construido frente a la iglesia de San Lorenzo, en la Taconera, cuando las monjas agustinas ocuparon el de San Pedro. Por cierto que, al hilo del centenario de San Agustín, al día siguiente El Pensamiento Navarro dedicaba su portada al "glorioso centenario". Diario de Navarra, en cambio, dedicaba su espacio principal a la necesidad de una "educación moral". Cada cuál a lo suyo, oiga...

Foto: J.J. Arazuri ('Pamplona, calles y barrios')

En 1930y más concretamente el 28 de agosto, día en que se obtuvo la foto, el monasterio Viejo de San Pedro, y el barrio de Errotazar en general, estaban de celebración. Aquel día, domingo por más señas, se celebraban nada menos que 1.500 años de la muerte del fundador de la orden, San Agustín, un argelino de Tagaste conocido en su tiempo como Agustín de Hipona, que había fallecido el 28 de agosto del año 430.

La fotografía, muy sencilla en su concepción, muestra la entrada al monasterio aquel día de fiesta. Puede verse que la puerta, abierta de par en par para la ocasión, se ha adornado con bombillas, todo un dispendio para la época. Bajo ella posa un hombre algo mayor, ataviado con una especie de uniforme y con bastón, y seis críos, cinco chicos y una moceta, dispuestos perfectamente escalonados por alturas. El más pequeño de ellos, a la derecha, se vuelve para mirar a otros dos críos, que juegan algo más lejos.