laro que las fechas sirven para ponernos en situación. Hace un par de años ya se había dado carpetazo a la celebración de los Sanfermines y hace un año, más o menos y según edad, ya estábamos metidos en el ajo con las primeras dosis de las vacunas, que si Pfizer o Moderna y la AstraZeneca fíjate. Ahora ya nos hemos liquidado casi toda la escalera sanferminera y hay cosquilleo por que se acercan las fiestas y también crece una enorme curiosidad.

¿Cómo serán los Sanfermines del regreso? ¿Cómo los recibiremos viejunos y jóvenes? ¿Tenemos el cuerpo en condiciones para semejante follón? ¿Estamos preparados o necesitaremos un periodo de adaptación? ¿Nos acordamos de verdad de qué va lo que se nos viene encima? ¿Sabremos interpretar las fiestas con su sana emoción o vamos a desandar el camino del respeto y la medida y se va a lanzar el personal por la pendiente? ¿Habrá variado la ciudad en algunas costumbres fiesteras y aparecerán nuevos espacios y nuevos momentos? ¿Los pamploneses hemos cambiado ante los Sanfermines? ¿Habrá actividades y actos en los que el paréntesis ha hecho mella? ¿Ha variado para el visitante en potencia, también para el guiri, la consideración de la fiesta, de lo que se espera, de lo que quiere o busca? ¿Con dos años de reflexión, con la perspectiva por el parón, algunos actos de los Sanfermines se han quedado pasados, chapados a la antigua o quizás imposibles de comprender para el siglo XXI?

También hay cuestiones de auténtico interés, como ¿Cuántos influencers vendrán a Pamplona? ¿Victoria Federica se dejará ver? ¿Algún desconocido de los que sale en la tele y quiere medrar buscará notoriedad con alguna algarabía programada? Y otros asuntos de verdadera necesidad: ¿Cómo estarán los precios? ¿En dónde estará el peor kalimotxo y de qué estará hecho? ¿Sentarse en una terraza será sinónimo de acabar con el presupuesto? ¿Hay algún sitio libre para almorzar el día 6?

Hay que estar preparados porque llegan tiempos en que nada volverá a ser igual... Vete mirando la ropa blanca de hace un par de años.

Los Sanfermines del regreso tienen mucha emoción, pero también despiertan mucha curiosidad... A ver cómo reaccionamos ante la fiesta