Rishi Sunak, primer ministro del Reino Unido por poco tiempo, según parece: Le confieso que me costó mucho seguir la comparecencia en la que anunció el adelanto electoral para el 4 de julio. Mi atención estaba centrada, casi hipnóticamente, en la inmisericorde lluvia que caía sobre usted en el exterior del 10 de Downig Street y, especialmente, en esa especie de flequillo con tirabuzón de su cabellera que aguantó el aguacero prácticamente incólume.

Mucho me temo que no es una metáfora de lo que ocurrirá con su formación, el Partido Conservador, tras someterse a las urnas dentro de apenas mes y medio. No hay encuesta que no pronostique un descalabro sideral, veinte puntos por debajo de los laboristas, e incluso, con la posibilidad de ser sobrepasados por los liberal-demócratas. Boris Johnson se tomará una pinta para celebrarlo.