Estamos estos días concienciando a la ciudadanía de la necesidad de colaborar en lo posible en la lucha contra esta enfermedad. En nuestra ciudad contamos con Saray, asociación dedicada a estos menesteres, y que cuenta con un grupo de entusiastas mujeres voluntarias. El trabajo a desarrollar es mucho, y más en estos tiempos difíciles. Sería bueno que aquellas personas sensibilizadas y que se hallen con ánimo de colaborar pudieran contactar no solo con Saray sino con cualquiera de los profesionales que asimismo desarrollan programas de detección precoz y de prevención.

Es muy gratificante comprobar cómo mujeres de entre 20 y 40 años responden al llamamiento que se les hace para llevar a cabo estudios y programas encaminados a la prevención, permitiendo, tras diferentes revisiones y testimonios, aportar nuevos y valiosos datos que nos hacen estar cada vez más cerca no sólo de vencer la enfermedad, sino, y esto es fundamental, evitar que esas irregularidades en los receptores, conductos, lobulillos, esas fibrosis, esas alteraciones en otros tejidos de sus mamas y otras anomalías, puedan con el tiempo malignizarse.

Por otra parte, sería maravilloso que los ciudadanos fueran conscientes de que se puede colaborar con las asociaciones dedicadas a la lucha contra el cáncer, de diferentes maneras: aportando donativos, apoyando como voluntarios, impartiendo charlas, atendiendo como profesionales de la salud a las afectadas y mujeres en riesgo algunas horas de forma gratuita (todo es proponérselo, algunos ya lo hacemos). El éxito estará garantizado si somos solidarios, y creamos equipos en los que el compromiso, la organización y la eficacia vayan de la mano. Pocos momentos tan gratificantes hay como aquellos en los que verificamos la curación de una de estas mujeres, y aquellos otros en los que, sin existir la enfermedad, hemos conseguido hacer desaparecer ciertos peligros observados en esas jóvenes mujeres citadas al principio del comentario, gracias a revisiones periódicas y pautas multidisciplinares a seguir (a rajatabla) y a las que todavía faltan años para que puedan ser citadas para las pruebas de mamógrafo establecidas oficialmente.