Cada 3,5 minutos se recoge un animal de compañía en España. Maltratados, abandonados en la calle o, si tienen suerte, en una perrera. Es comprensible que con esta situación de crisis haya familias que tengan la necesidad de prescindir de algo. O que personas no tengan ni para sobrevivir, pero por eso mismo hay que pensar en las consecuencias antes de asumir responsabilidades. Es algo que podemos atribuir a muchas cosas más que a una mascota. "El perro es el mejor amigo del hombre" o "Los animales no son juguetes" son frases que todos hemos oído pero no hemos llegado a escuchar. No todos estamos capacitados para hacernos cargo de una cosa tan seria como puede ser un animal, cuando incluso lo que consideramos más valioso y más cuidamos es un móvil.
Por mi experiencia, gracias a un voluntariado, he podido ver el trabajo que ejercen estas organizaciones protectoras de animales y concienciarme del valor que merecen y no damos a estos animales. Se hacen cargo con los medios que tienen de lo que otros se han cansado, no quieren o no pueden mantener. Es triste que alguien compre un perro, lo pasee, se aburra y lo quiera devolver. Es por eso por lo que tenemos que ser consecuentes. Así que, antes de comprar o adoptar, párate y piensa.