Hace unos meses con mi familia y amigos me fui de visita a Lacturale. Fui recibido de una manera muy cercana y por sus máximos dirigentes. Nos enseñaron toda la granja desde la recría hasta la recogida de la leche. Nos sorprendió la limpieza, modernidad de las instalaciones y el cuidado de los animales. Son ganaderos de este siglo. Pudimos saludar a los trabajadores de la granja y comprobamos con ellos la satisfacción de un trabajo hecho con ilusión y un trabajador ilusionado. A nosotros no nos quedó ninguna duda de la calidad de la leche, pero lo que nos encantó fue su filosofía como empresa: una cooperativa de ganaderos navarros con un compromiso claro con la sociedad, medioambiente y con el consumidor. Pudimos comprobar que el precio final es la consecuencia de todo ello y que acertamos pagando su precio.

Tras la noticia que ha salido acerca de la imputación a una granja navarra por dopar a sus vacas, me encantaría que todas las granjas y empresas fueran tan transparentes como los ganaderos de Lacturale, ahora sabríamos cuál es esa granja imputada y a quién entrega su leche, y no pasaría lo de siempre: que pagan justos por pecadores. Os animo a que conozcáis a fondo Lacturale, no os quedará ninguna duda.