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'8 apellidos vascos'

Habíamos oído muchos elogios de amigos y parientes que la habían visto y, pasadas las colas iniciales, hemos ido a verla. Nos ha gustado mucho y nos hemos reído a gusto. Se ha hablado mucho de sus tópicos y de su supuesto carácter simplón y sin fundamento, pero a mí me ha parecido que tiene más fondo que todo eso. Algunos ya han mostrado su malestar con la película y a otros me figuro que tampoco les hace la menor gracia. Me parece que al igual que Vaya Semanita desdramatizó el conflicto vasco y ayudó al fin de la lucha armada, esta película está haciendo también una labor positiva. No en vano humoristas geniales, desde Charles Chaplin hasta Forges, señalan que la mayor arma contra los tiranos es el humor. El hecho de ser ya la película más taquillera de la historia de España no es baladí. Por encima de tópicos, los ciudadanos se han reído de situaciones que hasta hace poco eran tabú, lo cual no es poco. Karra Elejalde ha conseguido que a todos se nos haga entrañable su personalidad, y todo el mundo ha entendido su mentalidad, y dónde está el sur para un vasco.

Esta película aporta su granito de arena, no pequeño, para que la sociedad tenga su propio criterio no contaminado por políticos que han vivido del enfrentamiento y han servido café para todos con tal de no afrontar la realidad y no respetar las identidades de territorios forales y/o comunidades históricas con lengua y cultura propias. Que andaluces o extremeños entiendan esa identidad y la respeten, y que eso sea correspondido por los vascos como en la película, puede ser un anticipo de esa gran amistad que puede iniciarse entre unos y otros después de que cada una de las naciones que hay en el Estado puedan decidir su camino.

Una vez le oí a un lehendakari en una emisora de radio que si no viviera en Euskal Herria viviría en España, porque es un sitio maravilloso para vivir, como esa Sevilla que nos embelesa en la película. El film tiene también carencias, como cuando se frivoliza con temas que aún son muy sangrantes. Incidentes que, a diferencia del resto del Estado, son juzgados con legislación de excepción. Serán necesarias nuevas iniciativas para superar todo el sufrimiento, para ello hará falta mucha más comunicación entre la sociedad vasca y la española. Será necesario que quienes ejercieron la violencia reconozcan su error, en ambos bandos, cada uno en su medida. Habrá que empezar una nueva historia de libertad y respeto a la decisión de cada uno. Creo que esta película ayuda en este camino, por eso me imagino a qué búnkeres del poder no les habrá hecho gracia. Que se fastidien, el futuro no es de ellos sino de la mayoría que se ríe.