¡Ai ama! Vaya susto que me he llevado al ver esa caricatura de bruja fea en DIARIO DE NOTICIAS. Y va y resulta que además es de mi pueblo, de Zugarramurdi. Ya sabíamos que en el pueblo hubo (¿hay?) brujas, pero nadie nos había dicho que fueran feas? en fin, ¡qué batalla más difícil tenemos con este tema!
En aquellos terribles años de caza de brujas, más de la mitad de la población del norte de Navarra (y resto de Europa) fue acusada de practicar la brujería, y desde entonces la imagen de la bruja viene arrastrando dos lastres: el de que fueron malas personas y de postre, también se las representa feas y desagradables a la vista. Yo diría que hoy día la percepción de lo que es una bruja está cambiando, y dejando de tener aquella acepción negativa. Sin embargo, la representación plástica de la imagen de bruja todavía por desgracia sigue asociada a la fealdad, la nariz larga, la verruga y los pelos en la barbilla.
Como he dicho antes, gran parte de nosotras (y nosotros, porque en minoría, pero también hubo brujos) somos descendientes de aquellas personas, que fueron injustamente perseguidas y condenadas (esto está comprobado). Así que deberíamos decidir cómo queremos recordarlas. No dejemos que al sufrimiento que padecieron en vida, se le sume además la ignominia de recordarlas con aspecto repulsivo.
Al hilo del chiste de DIARIO DE NOTICIAS, le animo a J.J. Aós a colaborar con nosotras para recuperar la dignidad de aquellas personas. A romper con el estereotipo. Fuera verrugas y narices largas. Que dibujen a la bruja como mujer hermosa y caracterizada como sabia y honesta. Seguramente esta imagen se acercaría mejor a lo que ellas fueron en realidad. Creemos que eran así. Las reivindicamos así. Y queremos recordarlas así.