El motivo de mi queja es que el jueves 15, sobre las 2 del mediodía, a la altura del INSS de Conde Oliveto, estaba esperando la villavesa número 4, la que nos lleva a Burlada, y a pesar de estar en la parada, tocarle repetidamente el cristal de la puerta, la conductora me ignoró y me dejó en la parada. Lo que más grave me ha parecido es que para ello no ha tenido reparos en pasarse el semáforo en rojo, con el consiguiente peligro para el paso de peatones.