Pedir la atención del que te escucha o te lee es verdaderamente un acto de generosidad digno de agradecer. Hoy no quiero que este acto de generosidad sea para este humilde escritor, quiero que sea una dedicatoria exclusiva para todos esos jóvenes que han iniciado una huelga que lleva por título Viernes para el futuro o, si lo prefieren, 15-M Climático. Este tsunami verde ya ha llegado a España y todo gracias a una adolescente sueca de 15 años llamada Greta Thunberg, tras su conferencia de la ONU sobre el cambio climático celebrada en Polonia. Intervención que sacó los colores a la comunidad internacional y que produjo en el auditorio unos momentos de inquietud y desasosiego. En el verano del 2018 Greta empezó una huelga por el clima durante tres semanas justo antes de las elecciones suecas. Su protesta continuó después todos los viernes sumando apoyos e inspirando a otros estudiantes y a continuación en toda Europa y en todos los continentes. Esta huelga internacional del 15-M verde, nos enseña algo que los mayores no hemos aprendido todavía, “tenemos un solo planeta y si no lo cuidamos, no existe recambio”. Ahora tenemos un momento electoral muy especial para demostrar a nuestros hijos y nietos que a nosotros/as también nos importa su futuro, que, en este presente, de nada sirve pelearnos por una bandera, un rey, un territorio o una religión, que nuestro sistema de bienestar se desmorona, que los polos (la nevera y el aire acondicionado que regula las temperaturas), los estamos destruyendo. Esta alarma social ya es palpable con récord en la media de temperaturas alcanzadas, en el aire que respiramos, en las enfermedades, en las aves migratorias, en las islas de plásticos de nuestros mares que al final llegan a nuestros platos, en los incendios o en los climas cada vez más extremos y destructivos. Otra de las alarmas son nuestras abejas, encargadas de polinizar las flores de los alimentos, cada vez se mueren más por culpa del cambio climático y también por los pesticidas. Si encima nos dicen los expertos que a partir de 2030 podríamos empezar a vivir los peores efectos del cambio climático, 2030 está a la vuelta de la esquina. ¿Cómo no van a estar preocupados nuestros jóvenes? De nosotros/as depende su futuro y con esta huelga nos están pidiendo a gritos que dejemos de pelearnos por memeces, que lo verdaderamente importante lo tenemos que empezar a solucionar ahora mismo, estamos a tiempo. Desde estas líneas, quiero felicitarles por la iniciativa y decirles que existen también personas adultas y partidos políticos que, entre sus prioridades también está combatir el cambio climático.