Nos habéis dado un gran testimonio de solidaridad. Todo lo que se diga de vosotros es poco, enhorabuena porque después de tanto sufrimiento por la injusticia con vuestros hijos/as habéis sido generosos hasta abrumarnos.

Sin embargo, ha sorprendido en Euskal Herria el impacto causado en la opinión pública la decisión de Bel Pozueta de aceptar ser candidata de Euskal Herria Bildu (EH Bildu) a las Generales por Navarra. Desde el máximo respeto que merece tal decisión, pues es una magnífica candidata que le prestigia tanto a ella como a Altsasu y sin duda a EH Bildu, hay quienes consideran que esa candidatura puede provocar la aparición de bandos en el grupo de Gurasoak cuyos hijos/as están encarcelados.

Partiendo del hecho de que todas las opiniones son respetables, parece que para algunos explicitar las opciones políticas personales es un factor negativo que debería evitarse en pos de la cohesión del colectivo. Ese criterio pugna con el concepto de libertad ideológica que es el fundamento de la democracia.

Parecería que los que consideran inapropiado la candidatura de Bel quisieran limitar la democracia a votar en las elecciones, lo cual presupondría que las ideologías no conviene difundirlas si se pretende que haya armonía.

Sería un exceso que se prefiriera la decisión política tomada por Bel de presentarse a las elecciones, pero implícitamente no lo sería si se hiciera pública por otras formaciones políticas. Argumentan que es negativo para la imagen del pueblo. Sin duda que es opinable, pero en modo alguno condenable, pues lo cierto es que la hipotética presencia de una ciudadana en las instituciones tendría una publicidad mayor para denunciar el caso de los encarcelados injustamente.

No corresponde a nadie analizar la decisión personal que motiva la presentación de la candidatura de Bel, y menos valorar si es o no beneficiosa para EH Bildu. Aquí se pide respetar con criterios democráticos la decisión libre de una persona que ha adquirido una gran relevancia defendiendo con honestidad los intereses de la población y poner de manifiesto el rechazo de quienes vienen a hacer política de alcantarillas utilizando a hijos/as prisioneros/as de este dignísimo pueblo.