Hace casi veinticinco años, comenzó mi andadura en Noáin-Valle de Elorz como empleado municipal, con el cometido de cuidar las zonas verdes y mejorar la calidad de vida del municipio. Llegados a este punto, debo decir hasta pronto o hasta siempre a esta parte tan importante de mi experiencia profesional y vital. Quiero agradecer todo lo que me han dado este municipio y las personas que me han acompañado, que ha sido mucho. Gracias a los alcaldes, concejales y presidentes de concejo que vieron en la jardinería primero y en la sostenibilidad después, magníficas herramientas para mejorar la calidad de vida y la autoestima de la población. Pusieron la confianza y los medios necesarios e hicieron realidad metas a priori imposibles. Jon Oyarzun y el concejal Alberto Osta nos retaron a conformar un servicio municipal de jardinería de calidad. Julián Arranz y Josi Erro, aunque de mandato breve, evidenciaron su apoyo, Oscar Arizcuren dio continuidad a la línea innovadora y audaz de Miguel Elizari. Sebastián Marco municipalizó con gran acierto el mantenimiento de los jardines de los pueblos y los polígonos industriales. Alberto Ilundain continuó todos los proyectos y cambios desarrollados. Termino con Miguel Elizari y Juan Balda, por ser el alcalde y el concejal que han marcado un antes y un después en el municipio. Líderes, con visión amplia, que supieron rebasar sus prioridades personales y políticas para sumar las de los demás. Confiaron y nunca pensaron exclusivamente en votos. ¡Quién nos iba a decir que comenzando con unas simples azadas íbamos a lograr 25 premios a escala autonómica, estatal e internacional! Destacan los cuatro premios de Naciones Unidas a la Jardinería Ecológica Municipal, el Plan Municipal de Cambio Climático, el Parque de los Sentidos y el centro Lorenea. Premios a proyectos y acciones ejecutadas sobre las zonas verdes y la sostenibilidad. Cambios palpables para la población que convirtieron al municipio en un faro de sostenibilidad e innovación durante ese tiempo. Parte de las más de 100 acciones desarrolladas por este ayuntamiento. No puedo olvidar a Rafael Tortajada, guía imprescindible en este camino. Gracias a la población por su apoyo, aprecio y colaboración. Enormes todas las personas que han participado en los numerosos voluntariados celebrados: las 19 ediciones del Hermano Árbol, Bionoain, construcción de Lorenea, Avicompostero, alcorques floridos o el festival Espíritu del Planeta en el que nuestros gigantes y dantzaris bailaron con aborígenes australianos, nativos americanos o de Siberia. Gracias a todos los compañeros y compañeras de todo el Ayuntamiento que han apreciado la ilusión puesta durante todo este tiempo. He aprendido mucho de vuestra compañía y os deseo lo mejor. Gracias al equipo de Jardinería y Agenda 21: no puedo expresar como se merece mi cariño y valoración a vuestro ser y hacer durante tantos años. Habéis conseguido cambiar este municipio para siempre, dándole belleza, calidad de vida, salud y autoestima. Mis hermanas y hermanos: Silvia, Raúl, Monika, Koldo, Marijo, Lourdes, Iñaki, Itzi, Marta, Bea, Txus y todas las personas que habéis formado parte del mejor servicio de jardinería que he conocido. Calidad personal y profesional a saco. Biba zuek! Bihotzez eskerrik asko! Que cuenten conmigo las entidades y municipios que quieran mejorar de la calidad de vida mediante la jardinería, la sostenibilidad y sobre todo el cuidado del clima. Me queda un intenso sabor dulce y por ello me gustaría despediros agradeceros todo en persona. Quizá sea un hasta pronto, pero por si acaso, quisiera saludaros el próximo día 16, viernes por la tarde, paseando por el parque de los Sentidos.

*Responsable de Jardinería y Agenda 21 de Noáin-Valle de Elorz