l viernes 22 de octubre a las 19.45 horas, conscientes de los problemas de tráfico y aparcamiento que se iban a sufrir en las inmediaciones de El Sadar, mi familia y yo apostamos por el servicio público. Hasta ese día tenía entendido que la línea 9 (en días de partido) ampliaba su recorrido hasta el campo. Cuál fue mi sorpresa cuando el chófer realizó su última parada en una de taxi, fuera del parking de la UPNA, ni siquiera en su parada habitual.

La sorpresa fue mayor cuando finalizado el partido nos dispusimos a coger la 9 en el campo pero no aparecía por ningún sitio. Había R1, R2, 1, 5, 6, 11 y 16 (como servicios especiales) y de la 9 ni los chóferes sabían nada. Al final el chofer de la línea 1 nos dijo que creía que la línea 9 no iba a llegar y que no nos quedaba otra opción que utilizar una que nos subiera al centro (como ésa) y allí realizar trasbordo con la N7. Resignados y sin otra alternativa hicimos caso. Subíamos al autobús a las 23.00 horas y se trataba de un servicio especial; coste del viaje 0.70€ con la tarjeta. Llegábamos a la parada de la Av. Baja Navarra para hacer el trasbordo a las 23.30. Tiempo de espera N7, 20 minutos. Pero cuando subimos al autobús en lugar de coste 0 por trasbordo, 1,20€ por servicio nocturno. Eran pasadas las 00.15 cuando llegábamos a la parada más cercana a nuestro domicilio en San Jorge.

El lunes siguiente me dirigí a la Mancomunidad a través de una instancia mediante la web, señalando lo ocurrido. A día de hoy, no existe respuesta. Antes de enviar esta carta me he puesto en contacto vía telefónica, y la respuesta ha sido (después de consultarlo) que como la línea 9 es un autobús eléctrico y se recarga en la UPNA, no puede realizar el servicio especial hasta El Sadar. A esto tengo que decir: que yo sepa, hace ya varios años que la línea 9 la realizan autobuses eléctricos y se hacía ese servicio especial, con autobús eléctrico u otro no eléctrico como lo hacen habitualmente en horas punta como refuerzo; aquel día, el autobús no paró a recargar en la UPNA, de hecho no entró en su parada (y no recuerdo a ciencia cierta que fuera eléctrico) y, por último, ¿un autobús que recarga en la estación de Renfe debe cargar también en la UPNA? Dudo que tengan tan poca autonomía. En resumen, una excusa baladí.

La experiencia no anima al uso del transporte público. Según se ha publicitado, se van a subir las tarifas. Si queremos fomentar el transporte público, la solución no está en eliminar servicios con excusas baratas (muchos varían de días laborales a fines de semana). Suprimir un servicio de alta demanda como éste que prestaba la línea 9 es un craso error. Habrá que mantener los servicios, ampliarlos (Navarra Arena) y aumentar su calidad si queremos que la ciudadanía elija el transporte público.