A veces pierdo el equilibrio. Respiro, busco mi espacio seguro y regreso con más fuerza. Sergio Ramos -SR93, acrónimo convertido en Midas- ha lanzado Cibeles, un hit insólito.
La psicóloga Sonja Lyubomirsky escribió que el 40% de nuestra felicidad depende de nuestros actos y solo un 10% de las circunstancias. Yo no soy melómano -mi cultura musical no va más allá de Cachitos de hierro y cromo-, pero este estreno confirma que el mundo está como para bajarse.
Dicen que el dinero no da la felicidad, aunque ayuda a cumplir sueños. Para algunos. Hoy basta con una campaña de marketing arrolladora, el respaldo de grandes cabeceras, un estreno con aires de superproducción, productores de moda, el imán del fútbol, un audiovisual millonario y aderezado con el autotune. Todo para servir el plato de siempre: macarrones con queso, éxito asegurado entre la juventud. El saber cantar es lo de menos.
Qué más se puede decir. Que mañana contará con millones de visualizaciones y que aquella comedia musical de ¡Mamá, quiero ser artista! hoy se resolvería con unos cuantos euros. Respiro. Ya estoy más calmado. Toca cenar: espero no empacharme.
