el premio de Unesco al programa de coeducación de niñas y de mujeres del Gobierno de Navarra Skolae vuelve a dejar en evidencia que la dura campaña orquestada desde UPN-PP y sus altavoces mediáticos y determinados centros educativos católicos no fue sino una desinformación basura más disfrazada con mentiras, invenciones, exageraciones e insultos y amenazas. Skolae fue, como el euskera o el IRPF de maternidad, parte de los cartuchos de la última parte de la Legislatura contra el Gobierno de Barkos parea tratar de ocultar la realidad de sus avances sociales, políticos, financieros y económicos. Una estrategia alentada por los sectores más extremistas de la derecha de Navarra con el beneplácito y el altavoz de supuestos periodistas y medios de comunicación. Pero la realidad ha vuelto a descubrir la falsedad de sus argumentos. Cabe recordar que la entonces consejera de Educación y ahora parlamentaria de Geroa Bai, María Solana, sufrió acoso y amenazas. Y que UPN logró, con complicidad jurídica, que se hicieran públicos -como intentó con menos éxito Vox en Andalucía con los técnicos que tratan la violencia machista- los nombres de las personas responsables de la elaboración del programa Skolae. Incluso que un juez admitiera a trámite una denuncia y tuvieran que acudir a la Audiencia de Navarra a declarar. Todo impresentable. Este premio internacional de Unesco se suma al aval del Ministerio del Gobierno de Sánchez y al apoyo de las instituciones europeas, educadores, pedagogos, centros escolares, organizaciones sanitarias y de la infancia. También demuestra que toda la campaña fue un burdo intento de manipular y agitar a la sociedad por simples intereses políticos con la complicidad de grupos ultracatólicos. Sin olvidar que Skolae tuvo el apoyo de 33 de los 50 parlamentarios de la Cámara foral. Su objetivo principal es combatir las conductas sexistas y la violencia machista con programas educativos. Porque se trata de un problema de educación y para ello la coeducación en la igualdad es un excelente ejemplo si se quiere de verdad un cambio generacional y evitar los crecientes intentos de blanquear y banalizar el machismo y la violencia sexual. El trabajo desarrollado tras Skolae y la exconsejera Solana fueron objeto de una infame campaña de manipulación y acoso personal por parte de meapilas decimonónicos -tan fariseos y falsos como la complicidad interesada que les ofrecieron UPN y PP-, que ahora Unesco ha dejado en las más ridícula evidencia.