Más población y más hogares. Los hogares de personas solas seguirán creciendo en los próximos años, según los datos que arrojó ayer el INE, que prevé para el periodo 2022-2037 un crecimiento del 17% en el número total de hogares de la Comunidad foral (de 260.768 a 305.122) y estima que los hogares unipersonales representarán el 30,1% del total. En el conjunto del Estado dentro de quince años habrá casi 6,5 millones de hogares habitados por una sola persona, un 27,3% más que en la actualidad, datos que nos alertan de la transformación social en la que estamos inmersos desde hace años y también de las necesidades asociadas a la prevención de la dependencia (mejorar la autonomía y bienestar de las personas mayores) y al sistema de cuidados. El porcentaje de población de más de 65 años, que actualmente se sitúa en el 20,1% del total, alcanzará un máximo del 30,4% en torno a 2050, para comenzar a descender entonces. El mayor problema que entraña la presencia de hogares unipersonales está en la soledad no deseada de muchas personas mayores sin una red familiar. Los cambios sociales de los últimos años, en los modelos familiares, en el mercado laboral, en el tiempo disponible de las personas, entre otros factores, ha empujado a muchas personas mayores a permanecer solas en su proceso de envejecimiento. Las familias monomarentales que representan el 9,5% del total en Navarra, y en su mayoría compuestas por mujeres, son otro de los colectivos que requieren una mayor protección del sistema social al estar más expuestas a situaciones de pobreza y necesidad. Sin olvidar que hay un porcentaje cada vez mayor de gente joven que elige voluntariamente vivir sin pareja o que se ve abocada a vivir con sus padres bien para cuidarlos o por necesidades económicas debido a la precariedad laboral. El apoyo a la conciliación en todos los ámbitos y el fomento de las ayudas en materia de vivienda en un mercado donde resulta difícil encontrar alquileres asequibles resultan imprescindibles en pleno debate sobre el modelo de políticas fiscales progresivas y de protección social. Pese a los discursos xenófobos de la extrema derecha cada vez más creciente la estadística también muestra que el aumento de población se deberá a la migración internacional, ya que el aumento de las defunciones y el descenso de los nacimientos dará lugar a un saldo vegetativo negativo.