a Unión Europea ha ideado un curioso sistema de semáforos para hacer un seguimiento de los contagios por covid. Siguiendo sus idílicos parámetros epidemiológicos, tan solo Finlandia se encuentra en la zona verde (incidencia acumulada menor a 25 por cada 100.000 habitantes y la positividad de los test inferior al 4%), Alemania estaría en naranja, mientras que 19 de los 27 países del espacio Schengen, o sea la mitad de Europa, se sitúan en la línea roja. Aunque cada país decidirá las medidas sanitarias que aplica como PCR o cuarentenas habrá una tabla de referencia, seguramente para vigilar a los turistas. Hoy, todo el país se encuentra bajo una enorme mancha roja salvo Asturias. Una manera muy diplomática de limitar los desplazamientos entre estados y proteger a los más "limpios". Seguramente sea lo mejor, no digo que no, no moverse a ningún lado, ni a casa de la vecina con una alerta de por medio. Sería bueno que este semáforo lo trasladásemos también a cada barrio y pueblo, sobre todo en Navarra. En muchas calles (botellones), plazas, viviendas y sociedades debería activarse un semáforo en rojo con propuesta de sanción automática. Podemos cerrar a las diez los bares pero mientras quede la gente para hacer lo que le da la gana, y además sin mascarilla, mal andamos.