Desde hace tiempo venimos asistiendo con preocupación al avance de discursos xenófobos en nuestra sociedad. Pero lo que estamos viviendo estos días es sencillamente inaceptable. Campañas de acoso y señalamiento contra inmigrantes, bulos que criminalizan la pobreza, y una estrategia política basada en el odio y la mentira que recuerda los capítulos más oscuros de nuestra historia reciente.
Como sindicato de clase, como organización democrática y comprometida con los derechos humanos, decidida a defender a los trabajadores y trabajadoras por esta condición y no por su lugar de nacimientos, desde UGT Navarra no podemos permanecer callados ante esta deriva. Los ataques contra las personas migrantes, amparados por partidos como VOX y respaldados por determinados colectivos de extrema derecha, no son meras opiniones: son agresiones. Son un intento deliberado de dividir a la clase trabajadora y a la sociedad en general, de enfrentar a quienes tienen poco entre sí, para que quienes lo tienen todo sigan acumulando privilegios.
Lo hemos visto en manifestaciones convocadas para sembrar miedo. Lo hemos visto en post en redes sociales que estigmatizan a los extranjeros. Lo hemos visto en vídeos y declaraciones que criminalizan por el color de la piel, por el origen o por el acento. Es intolerable que se intente convertir a las personas inmigrantes en chivo expiatorio de todos los males, cuando son parte imprescindible de nuestra sociedad: trabajan en nuestros hospitales, cuidan de nuestros mayores, construyen nuestras ciudades, cosechan nuestros campos. Olvidando que somos un país de inmigrantes y todos tenemos a algún familiar que tuvo que emigrar para intentar sacar adelante a sus familias. Olvidando que la diversidad ha sido, históricamente, una fuente de riqueza cultural, social y económica.
Como secretario general de UGT Navarra, me veo en la obligación moral y política de alzar la voz en defensa de aquellos sectores de la sociedad que, por su condición de inmigrantes, son el blanco constante de discursos de odio y discriminación. La España que soñamos y defendemos no puede ni debe tolerar que partidos como VOX y otros colectivos xenófobos continúen promoviendo actitudes y políticas que dividen y hieren.
El discurso xenófobo no es solo una cuestión de opinión, es un ataque directo a la cohesión social y al respeto mutuo, pilares fundamentales de la convivencia democrática. Ya está bien de que la impunidad se confunda con libertad de expresión. Llamar a la confrontación social, al enfrentamiento entre vecinos, no es libertad, es delito, y tiene que tener consecuencias. Por eso, desde UGT Navarra apoyamos la iniciativa impulsada por la asociación ACO (Asociación de Comunidades Originarias) para denunciar al líder de VOX, Santiago Abascal, por incitación al odio (https://actionnetwork.org/forms/firma-para-apoyar-la-denuncia-de-aco-contra-abascal-por-incitacion-al-odio). Cada firma representa un compromiso con la justicia, con la defensa de los derechos humanos y con la construcción de un país donde la diversidad sea celebrada, y no despreciada.
El odio nunca es una solución. La convivencia, la justicia social, el empleo digno y la igualdad de oportunidades sí lo son. Navarra y el conjunto de España ha sido y debe seguir siendo una tierra de acogida, plural y solidaria. No permitamos que nos arrebaten eso. Frente al ruido y la mentira, más derechos, más fraternidad, más unión.
Porque ningún ser humano es ilegal. Porque todas las personas merecen respeto. Porque callar también es ser cómplice. Ni un paso atrás.
El autor es secretario general de UGT Navarra