Entre el 9 de abril y el 10 de diciembre del año 2021 se llevó a cabo la elaboración del diagnóstico de la Cultura en Huarte, liderado por el Servicio de Cultura y encargado a la empresa Ikerpartners. En el proceso intervenimos más de 220 personas entre particulares, asociaciones, comisión de cultura, Centro Huarte, políticos, etc… A través de entrevistas personales, encuestas a la ciudadanía, toma de contacto con los gestores políticos, laboratorios de reflexión, etc, se consiguió analizar la situación que se tenía en 2021 y se aportaron reflexiones e ideas para diseñar un plan de cultura para Huarte. Sin embargo, después de semejante trabajo, de la inversión realizada, del tiempo volcado por todos/as, el diagnóstico está guardado en una estantería y nada se sabe de seguir con la labor emprendida e iniciar un plan de cultura. Y sin un plan, se va a salto de mata, se cubre lo mínimo, se sigue reproduciendo las mismas cosas, no se evoluciona y se llega al cansancio de las personas que gestionan nuestra cultura. La falta de concienciación, de apoyo a la cultura, de no tenerla como una de las prioridades municipales, debería resultar alarmante tanto para el equipo de gobierno municipal como para toda la oposición, que nada dicen ni hacen.
Y, ¿qué dice el diagnóstico de la cultura en Huarte? Recojo a modo de resumen las conclusiones, lo que se pide, lo que analiza y mis aportaciones personales.
RESPECTO A LOS EQUIPAMIENTOS
– Necesidad de un espacio escénico digno. “A lo largo del diagnóstico ha quedado patente el descontento generalizado que existe en Huarte respecto al estado físico del espacio escénico”. Se ha presentado una infografía en 3D del posible diseño y ubicación del nuevo espacio escénico en Mokarte con fachada principal a la calle Zubiarte. Sin entrar en apreciaciones estéticas, nada se sabe de la capacidad del salón de actos, ni de los servicios anexos que llevará: camerinos, aseos, almacenes, posible bar/cafetería, tamaño del hall, etc… Nada se sabe tampoco ni del tiempo de ejecución ni de su financiación. ¿Para cuándo estará disponible?
– Necesidad de un espacio expositivo adecuado para albergar exposiciones de diversos formatos. “El diagnóstico también ha puesto de manifiesto las carencias del espacio que se destina actualmente a las exposiciones: altura insuficiente, iluminación deficiente, poca seguridad, espacio reducido…”. Se está exponiendo de malas maneras en un pasillo-corredor alrededor de la escalera de caracol central. Se tapó en el año 1998, provisionalmente, una parte del mirador para ganar algo de pared y ahí sigue. No hay vigilancia, ni las condiciones mínimas para exponer arte. Un pueblo que tendría que estar orgulloso del plantel de artistas que tiene y esos artistas no pueden exponer su obra aquí… ¿Por qué no se incluye en el mismo edificio del espacio escénico una buena sala de exposiciones?
– Necesidad de aumentar/replantear los espacios en la biblioteca. “Actualmente no es suficiente el espacio de estudio/consulta ni el destinado al estudio; además, la ubicación de la ludoteca y la falta de insonorización provocan molestias en la sala de estudio/lectura”. Hay muchas bibliotecas exentas de otros espacios de uso, de tránsitos continuos, etc… Una buena solución podría ser adecuar la escuela Infantil que está cerrada y trasladar allí la biblioteca. Estaría céntrica, aislada, cerca del colegio y junto a una plaza.
– Seguir en la línea de mejorar las instalaciones de Plazaldea. “Se echa en falta mejorar algunos aspectos como la dotación técnica, las condiciones ambientales y ampliar la disponibilidad en verano”. Plazaldea da mucho juego para actividades diversas: talleres, charlas, encuentros, club de lectura, etc, pero sus condiciones acústicas son malísimas, cuesta entenderse. Habría que remodelar las salas, su climatización y acústica.
RESPECTO A LA OFERTA CULTURAL
– Necesidad de novedad y variedad en la oferta. “La oferta se ha “estancado” en una línea de programación de carácter “tradicional”, que no resulta atractiva para otros públicos que buscan propuestas más arriesgadas, de otras disciplinas, otros formatos”. La cultura tradicional, el folclore unido a lo festivo, acapara prácticamente la programación, el esfuerzo de gestión y el presupuesto dedicado a Cultura. Las carencias señaladas anteriormente dificultan que se pueda avanzar en novedad y variedad.
– Necesidad de incorporar a la oferta actividades atractivas para la juventud. “La juventud es la que menos consume cultura en Huarte y prefiere desplazarse a otros lugares, sobre todo a la capital, a consumir música, cine y teatro. Y cuando se consume en el municipio se hace mayoritariamente al margen de la oferta convencional”. Una juventud con inquietudes culturales en su propio entorno, garantiza un futuro pueblo con alta calidad humana.
RESPECTO A LA PARTICIPACIÓN Y GOBERNANZA
– Necesidad de relevo generacional para su sostenibilidad. “Actualmente existe una amplia red de asociaciones culturales en Huarte que abarca expresiones artísticas diversas. Sin embargo, la participación en estos grupos no es alta y la edad de sus miembros comienza a ser elevada, sin atisbarse un relevo generacional que asegure su permanencia”. Si no regamos lo plantado perderemos la cosecha. Y si no guardamos las semillas de lo cosechado, no tendremos nueva planta, tendremos que ir a comprar fuera.
– Necesidad de mejorar la cohesión entre asociaciones. “El diagnóstico ha puesto de manifiesto la falta de transversalidad de las asociaciones; cada una organiza y acude a sus propias actividades, sin tener mucho en cuenta los que hacen las demás. No obstante, cuando se han organizado actividades conjuntas, el resultado ha sido excepcional”. Fundamental esto último.
– Existencia de algunas expresiones artísticas sin representación. “Existen en Huarte expresiones artísticas y artistas individuales que carecen de representación como colectivo y, por lo tanto, no aparecen en el “radar” del Servicio de Cultura y, como consecuencia, quedan al margen de actuaciones de apoyo”. Huarte ha sido y sigue siendo cuna de artistas, no los invisibilicemos.
Como se aprecia, todo o casi todo, está reflejado en el diagnóstico, tan solo queda hacer un buen plan de acción, dotarlo de presupuesto y calendarizar su ejecución. Huarte se merece esta mirada, solo hay que creerse que la cultura va más allá de lo tradicional y crecer como pueblo. ¿A qué esperamos a hacerlo?