el partido - Hasta seis ocasiones claras de gol fabricó Osasuna en la primera parte. Pero las acertadas intervenciones de Mariño mantuvieron vivo al Sporting. Un rival que, cuando buscaba con decisión el empate, se encontró con el gol de David Rodríguez. Con el 2-0, Diego Martínez siguió fiel a su idea: los cambios buscaban amarrar los puntos, con Arzura metiendo pulmones al doble pivote y Unai García para plantar tres centrales. ¡Como para esperar alardes...!