PAMPLONA.- Los jugadores de la primera plantilla de Osasuna se ejercitaron ayer a puerta cerrada en las instalaciones de Tajonar, algo que desde la llegada al club del técnico gallego Diego Martínez se ha convertido en práctica habitual cuando se acerca la disputa de un partido oficial. El preparador prefirió trabajar sin público ni periodistas en la grada y hoy repetirá estrategia con el fin de disponer de mayor tranquilidad durante la sesión y también con el objetivo de no dar pistas a su adversario, el Oviedo. El inicio del entrenamiento está previsto para las 10.30 horas. Después, la plantilla comerá y los convocados por el técnico rojillo tomarán el autobús en el que pondrán rumbo a Oviedo, donde pernoctarán para mañana enfrentarse al conjunto local a partir de las 18.00 horas.
Según informó el club navarro a través de su página de Internet, la sesión de ayer, la penúltima en Tajonar antes del duelo de mañana, constó de un calentamiento con velocidad y juegos lúdicos, para después trabajar aspectos tácticos a nivel defensivo y ofensivo. Osasuna añadió que Carlos Clerc y Aitor Buñuel, que durante la semana han trabajado a menor nivel que el resto de sus compañeros, se reintegraron al trabajo del grupo, mientras que Oier Sanjurjo continuó ejercitándose de forma individual, con el reto de recuperarse de la mejor manera posible de los problemas lumbares que le obligaron a retirarse lesionado del Anxo Carro de Lugo cuando apenas se habían consumido los 10 primeros minutos del encuentro entre los rojillos y el conjunto gallego.
Oier, la única baja En cualquier caso, el futbolista estellés no podrá jugar en Oviedo de ninguna de las maneras, ya que Oier cumplirá su sanción de un partido por acumulación de amonestaciones, castigo que se debería haber ejecutado el viernes de la pasada semana contra el Nàstic, pero que sigue activo al suspenderse por la nieve el encuentro contra el conjunto catalán. Sin Oier, Unai García aparece como su sustituto natural, pero el once que alineará mañana Diego Martínez es una incógnita.
“Nadie es superior al resto”
Cautela. El técnico del Oviedo, Juan Antonio Anquela, explicó ayer que, en el fútbol, es el trabajo sobre el césped el que “pone y quita jugadores” y advirtió de que se mantiene firme en su idea de no confiarse ante los resultados para que estos no sean engañosos cuando se firma una racha tan positiva como la de los azules. “Hay que estar siempre a las duras y a las maduras. Los resultados vienen en consecuencia del trabajo y, si no tenemos eso presente, nos equivocaremos: no somos nadie ni hay ningún equipo superior al resto”, dijo el jienense tras el entrenamiento de ayer a puerta cerrada, como el de Osasuna. - Efe