Pamplona - Lillo compareció ayer en la sala de prensa de Tajonar para hablar sobre la ampliación de su contrato con Osasuna hasta el 30 de junio de 2020 y el lateral derecho alicantino, que a finales de este mes cumplirá 30 años, se mostró agradecido por la “confianza” del club y se reconoció como “un privilegiado” por asegurarse un curso más en el equipo. “Mi familia y yo estamos muy felices de poder seguir aquí. Con muchas ganas de seguir trabajando y seguir aportando al equipo desde donde me toque”, expuso el futbolista.

El defensa alicantino reapareció el pasado domingo tras pasar dos meses y medio en el dique seco, primero por culpa de una pericarditis y después por una lesión muscular. Y en este sentido valoró positivamente la actitud de Osasuna por haber mantenido la oferta de renovación que le planteó antes de sufrir estos dos percances: “Me siento muy identificado con el club y valoro mucho su gesto porque, desde que me llamó Braulio -Vázquez, el director deportivo rojillo- hasta hoy, no ha cambiado nada su palabra. Me siento un privilegiado porque seguir aquí es muy importante y, sobre todo, porque el club mantuviese su palabra”.

Lillo, que llegó a Osasuna en el verano de 2017, ya dijo en su presentación como rojillo que quería “volver a jugar en Primera y hacerlo con Osasuna”. “Estamos ahí, quedan doce jornadas y espero y deseo que el equipo vuelva a Primera División. Si aporto en el campo, perfecto; y si es desde fuera, intentaré ayudar a los compañeros para que el día a día sea mucho más fácil”, prometió. Tras casi tres meses de inactividad, el jugador reconoció que le tocará trabajar aún más si cabe para tener minutos. - J.L.