Pamplona. La plaza del Castillo de Pamplona, escenario habitual de las grandes celebraciones, se ha convertido esta noche en un fiesta para celebrar el ascenso a Primera División de Osasuna.

Nada más concluir el partido que ha enfrentado a Albacete y Granada y saber que con el triunfo de los andaluces Osasuna era ya equipo de Primera, los aficionados han comenzado a congregarse a la espera de que llegaran los jugadores, el equipo técnico y la directiva que se habían reunido en El Sadar para ver el partido.

Con su llegada ha comenzado la fiesta, amenizada desde el kiosco por la plantilla que ha sido jaleada por los asistentes, a los que se ha unido para entonar los cánticos que tradicionalmente entona la afición rojilla en El Sadar.

Desde allí han sido coreados tanto jugadores, con cánticos especiales para algunos como el capitán Roberto Torres, como el equipo técnico, en particular el entrenador, Jagoba Arrasate.

En ese ambiente festivo tampoco han faltado los gritos animando a Aridane a cortarse el pelo y unas palabras en euskera de Brandon, que han sido muy aplaudidas.

Los jugadores han dado las gracias por el apoyo recibido para concluir cantando "somos un equipo valiente y luchador" y gritar "gora Osasuna".

Ni el día de la semana, un lunes, ni las horas, pasada la media noche, ni la temperatura, que ronda los ocho grados, desanima a los presentes que se resisten a abandonar el lugar.

Las celebraciones continuarán durante la tarde de este martes con recepciones en el Palacio de Navarra y el Ayuntamiento de Pamplona y un recorrido por la ciudad.