Los goles de Iago Aspas y de Jeison Murillo en el día de ayer rompieron otra racha positiva que traía Osasuna en los últimos partidos. De hecho, los rojillos no recibían dos goles en contra en el mismo encuentro desde hace poco más de un mes, pues la visita del Barcelona a El Sadar, correspondiente a la 26ª jornada liguera, fue hasta ayer la última derrota en liga de Osasuna y, además, la última vez en la que los rojillos recibían dos goles en contra. Jordi Alba e Ilaix Moriba fueron los goleadores en aquella ocasión. Desde entonces, y hasta la visita en Vigo, Osasuna solamente había encajado dos tantos, uno ante el Villarreal y otro ante el Valencia.