Rubén García abrió la ventanilla de recepción a las diez de la mañana y hasta la una de la tarde estuvo atendiendo a los numerosos ciudadanos comprometidos que, respondiendo a su llamamiento humanitario, acudieron hasta las instalaciones de Tajonar con alimentos y material de todo tipo para los damnificados de la guerra de Ucrania. La iniciativa solidaria del jugador de Osasuna ha significado que con estas aportaciones llenara en tres horas dos camionetas y otros dos vehículos con los que emprenderán el viaje hasta la zona próxima al conflicto.Rubén estuvo en la entrada de las instalaciones de Osasuna atendiendo, junto a amigos y familiares, a las personas que se acercaron con material sanitario, pañales, comida para bebé, ropa de abrigo y otros elementos necesarios para combatir la crisis humanitaria. El futbolista rojillo recibió encantado las aportaciones prácticas de solidaridad que, en todos los casos, fueron acompañados con palabras de afecto, reconocimiento ante la iniciativa e incluso algún cariñoso comentario de alguna veterana aficionada que le recordaba su profusión de tatuajes, "mi abuela me decía lo mismo", respondía amable y comprensivo el jugador.
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"La iniciativa surgió hace una semana y poco y, como el fútbol a veces no nos permite escaparnos, la semana del parón va a permitir que lo hagamos y montar este convoy de cinco furgonetas", recordaba el futbolista a pie de camioneta y con numerosas personas que iban y venían con donaciones del material y, de paso, notaban la cercanía de un futbolista de élite ejemplo de tipo sin remilgos. "Hoy (por ayer) era la recogida de material, para que la gente colaborara y ayudara. Nos han traído una barbaridad de cosas, llevamos dos furgonetas enteras, dos coches llenos también... Esperábamos mucha colaboración de la gente, una buena acogida, pero nos ha superado todas las expectativas".
"Estamos viviendo situaciones que no queremos que se den, pero que se están produciendo y en las que debemos aportar nuestro granito de arena, nuestro apoyo. Creo que como futbolistas tenemos un altavoz que puede atraer a más gente y pienso que es lo que está pasando en este caso. Hace un par de días publicamos que íbamos a estar hoy por la mañana aquí, y la acogida ha sido brutal".
Osasuna se entrenará estos días en Tajonar, hasta el jueves, y a partir de ese día, cuando el equipo inicia varios días de fiesta -hasta el martes-, Rubén García con su novia y otros amigos emprenderá un viaje de ida y vuelta, porque se llevará ayuda humanitaria y regresarán con niños ucranianos. "Cargaremos las cinco furgonetas, nos iremos el jueves para llegar el viernes por la mañana o de madrugada", explica. "Vamos a tener allí toda la gente que pueda volver con nosotros organizada con la Asociación Segunda Familia, una asociación de aquí, de Pamplona, que está haciendo una gran labor, sobre todo para que todas las personas que vengan tengan aquí familiares, amigos o conocidos o una casa para estar seguros y puedan ir adaptándose poco a poco. Es muy importante para nosotros que podamos ir y encontrar a a esta gente organizada, con todo lo que podamos preparado, para que no haya problemas".
"Intentaremos llegar cuanto antes, descansar poco, conducir muchas horas cambiando de conductores", continúa. "Iremos a Varsovia, que es donde nos han dicho que están las cosas mejor para este tipo de acciones humanitarias. Y a la vuelta habrá que parar más, traemos muchos niños, sobre todo niñas, y habrá que tomárselo con calma, no darles coca colas ni chupa chups, sino cuidarlos lo máximo posible y que se sientan lo más cómodos", bromeaba. La cuenta de aportaciones de la iniciativa solidaria reflejaba ayer 6.742 euros recaudados.
"Como futbolistas creo que tenemos un altavoz para atraer a la gente en este tipo de situaciones"
Jugador de Osasuna
