Brandon Thomas, actual jugador del PAOK griego, lleva un mes de marzo muy movido, envuelto en querellas judiciales, aperturas de restaurantes y pedidas de matrimonio. Desde su salida de Osasuna en la temporada 2020/2021, el jugador de Santanyí pasó por equipos como Leganés o Málaga, donde no encontró su mejor versión, hasta llegar a Grecia, donde ha disputado encuentros de Super Liga Europa.

Su llegada a Grecia

Desde que recaló en las filas del PAOK de la Liga Griega, Brandon Thomas ha logrado reencontrarse con su mejor versión goleadora. Cuando fichó por el equipo de Salónica, en la temporada 2022/2023, anotó 12 goles en 37 partidos, números que no registraba desde sus 13 tantos con el Mallorca en 2017. El año anterior, en su paso por La Rosaleda, marcó 9 goles, lo que le valieron una oportunidad con uno de los grandes de Grecia. Su buen desempeño, tanto a nivel individual como a nivel grupal, clasificaron al equipo para jugar la fase previa de la Liga Conferencia para la siguiente temporada. Además, el equipo llegó a disputar la final de la Copa Griega ante el AEK de Atenas, que acabó llevándose el trofeo a casa tras imponerse al PAOK por 2-0.

La siguiente temporada, el cuadro griego, respaldado por otros 12 tantos del delantero mallorquín, vivió una de sus temporadas más vibrantes, superando la fase previa de la Conference League y llegando hasta los cuartos de final de la competición, donde fueron eliminados por el Brujas (1-0 y 0-2), mismo equipo que eliminó a Osasuna en la fase previa del campeonato europeo. En la competición doméstica, el equipo se hacía con el título liguero, donde el atacante español fue protagonista gracias a sus 8 goles. Este año, el PAOK no pudo superar la fase previa de la Liga de Campeones, viéndose relegado a disputar la Liga Europa, donde cayó en febrero ante el FCSB rumano en dieciseisavos.

El últimos mes de Brandon Thomas

El 18 de marzo el jugador anunciaba en sus redes sociales que su pareja, Evi Pantazopoulou, y él se habían dado el 'Sí quiero', anunciando su compromiso. Días después, se celebraba el juicio donde el exrojillo reclamaba a Osasuna un total de 136.742 euros que pagó el malloqruín a Hacienda tras su salida de Pamplona. El jugador, que había cobrado en neto 475.000 euros, se enfrentó a una inspección fiscal que entendía que debía ser pagada por Osasuna, ya que así lo habían acordado tras su salida. Para finalizar el mes, el jugador anunciaba la apertura de un nuevo restaurante del que sería dueño, el Makao, ubicado en su Mallorca natal, iniciando así una nueva aventura empresarial.