EN 1885 la avenida de San Ignacio era una calle corta y algo apartada, que unía el centro vital de la ciudad, es decir el núcleo constituido por el paseo de Sarasate y la plaza del Castillo, con la muralla de Pamplona, allí donde esta se abría en la llamada Puerta de San Nicolás. En la fotografía, obtenida desde el balcón de Diputación, podemos ver en primer término los jardines del palacio, seguidos de la Basílica de San Ignacio (1), y al fondo de la calle la muralla que por este lado cerraba la ciudad (2), dotada del cuerpo de guardia que se puede distinguir en la foto y que flanqueaba a la Puerta de San Nicolás. Sigue el edificio militar de la Comandancia de Ingenieros (3) y una hilera de viviendas, ante las cuales parece que hay una fuente en la que se han concentrado 4 mujericas. A continuación se ve el edificio más notable del conjunto, la Alhóndiga Municipal, un caserón de ciertas pretensiones, levantado en 1850 sobre la zona donde se asentaban los talleres de los carreteros. Esta Alhóndiga fue siempre conocida por los pamploneses del siglo XIX como el Descargue, puesto que allí se depositaban los licores, vinos y aceites que entraban en la ciudad, para su posterior distribución por los comercios de la vieja Iruñea. Tras doblar la esquina hacia el paseo de Sarasate, vemos el pórtico de entrada al Descargue, el inmueble blanco de la Fonda Europa y el vetusto edificio de la Casa de Misericordia (4), antes de que fuera trasladada a la Vuelta del Castillo. En la acera del paseo pueden verse algunas casetas de feria, anunciando que la foto se obtuvo en San Fermín.
HOY EN DÍA esta calle del casco urbano pamplonés presenta un aspecto moderno y dinámico, bien diferente al carácter periférico que a tenor de las fotografías de época, tenía a finales del siglo XIX. Son muy pocos los elementos reconocibles que perduran de la imagen obtenida hace 126 años, más allá de la barandilla de hierro forjado del balcón de Diputación, que vemos en la esquina inferior izquierda en ambas fotografías. El abundante y frondoso arbolado que da sombra hoy a la calle de San Ignacio nos impide obtener un panorama general de la zona, aunque es fácil constatar que han desaparecido la mayoría de los elementos que lo conformaban en 1885.
La Basílica de San Ignacio fue totalmente alterada en 1927, cuando el arquitecto Serapio Esparza levanto la actual fábrica, dotada de torre y chapitel puntiagudo. La Puerta de San Nicolás y las murallas del sector fueron derribadas en 1915, al abrir la ciudad por este frente, y luego seguirían el resto de edificios militares de la zona. En cuanto al Descargue, fue adquirido por el Banco de España diez años después de la obtención de la foto antigua, en 1895, para instalar allí su nueva sede pamplonesa. Cuentan las crónicas que, a pesar del cambio de función, el viejo edificio siempre mantuvo un rancio olor a aceite. Tal vez por ello fue demolido en 1922, y en su solar se erigió el inmueble que vemos en la fotografía moderna, diseñado por los arquitectos Astiz y Yárnoz.