Pamplona - Retoman una idea de hace ya dieciséis años, cuando cientos de bicicletas de la ciudad (llegaron a ser unas 2.500) portaban una matrícula que decía Carril Bici Ya! Ahora, ciudadanos ciclistas de Pamplona y su Comarca, de los colectivos AMTS (Asociación de Medios de Transporte Saludables) y Iruñerriko Plataforma 8-80, han puesto en marcha una nueva campaña reivindicativa dirigida al Ayuntamiento de Pamplona para que ponga en marcha una verdadera red ciclista conectada, con carriles bici bien planteados y que resuelvan los problemas de seguridad de los ciclistas. Y su primera reclamación va a ser un carril bici que conecte el barrio de la Txantrea con la cuesta del Labrit.
La reivindicación, que lleva ya tiempo planteada por los vecinos del barrio y que ahora hacen suya también los colectivos de ciclistas AMTS y 8-80, se ha incentivado ahora, después de que en el último pleno municipal celebrado antes de Sanfermines “no se aprobara una propuesta socialista” para destinar 300.000 euros de las IFS (votaron a favor solo Aranzadi e I-E) para acometer esta vía para las bicicletas.
Así, los colectivos ciclistas han firmado un manifiesto en el que indican que “ante la negativa y pasividad” del Ayuntamiento de Pamplona “por parte de los grupos políticos de Bildu y Geroa Bai” para “realizar el proyecto y obra del carril bici entre la Txantrea y el Labrit”, desean “hacer pública su disconformidad absoluta con la decisión adoptada por dicha Corporación” y anuncian que van a llevar a cabo la movilización, porque “ha llegado el momento de que los ciudadanos ciclistas salgamos a la calle a reclamar nuestros derechos”, opina Jesús Sukuntza, ciclista y miembro de AMTS.
Señalan, de este modo, que la campaña tiene como objetivo “que se cumpla el acuerdo programático del Cuatripartito” para “buscar solución en la calzada a ese 60% de ciclistas que siguen circulando por las aceras por falta de seguridad”, a pesar de que la Ordenanza municipal ya no lo permite.
UN EJE “CON VENTAJAS” Respecto a la propuesta de carril bici como conexión entre la Txantrea y la cuesta del Labrit, consideran que este eje “ofrecería múltiples ventajas”. Por un lado “los puntos de origen y destino serían el primer Ensanche, el Casco Viejo, la Txantrea y Orvina a través del carril bici de Alemanes”, pero, además, “permitiría ramales de conexión con la Rochapea, el Camino de Santiago, Burlada y el paseo del Parque Fluvial del Arga.
Consideran también que “en una segunda fase, podría enlazar con el carril bici de Pío XII, prolongándolo a través de las calles Cortes de Navarra, Estella y Padre Moret, y añaden que podría “formar parte de los Caminos Escolares Seguros, con conexión a los colegios Redín y El Molino, así como con el Instituto de Irubide.
Los colectivos firmantes opinan que el espacio físico y el ancho de la calzada “permiten realizar este carril bici”, más aún, tratándose de una vía “que no cuenta con estacionamiento de coches”, y precisan que “requeriría poca obra y el coste económico sería reducido”. Respecto a su diseño, sugieren que “debería ser consensuado con los colectivos que trabajan el urbanismo feminista, así como las asociaciones de discapacitados”.
Los colectivos han encargado ya más de un millar de placas rojas reivindicativas, a modo de matrículas, para colgar de la bicicleta “en la parte frontal o trasera”, con mensajes en castellano (Carril bici Txantrea-Labrit ¡Ya!) y euskera (Bidegorria Txantrea-Labrit Orain!). Las placas, realizadas en PVC, van a ser distribuidas a los ciclistas que lo deseen “entre semana, por las calles”, en distintos puntos de la ciudad de “gran afluencia ciclista”, como la plaza del Castillo, junto a la iglesia de San Lorenzo, etc, y “hasta que no se ejecute la obra no vamos a parar”. Se trata de una campaña “pacífica” con la que “queremos dar la voz a los ciclistas, porque nos sentimos desatendidos, excluidos y, por lo tanto, discriminados”.
un carril bici que sea rojo
Identificable. Las placas o matrículas son rojas precisamente para recordar a “los responsables del Ayuntamiento de Pamplona” que los carriles bici “deben ir pintados en rojo, como se hace en todas las ciudades que son cuidadosas con los estándares de calidad de las infraestructuras ciclistas”. En Mutilva, Sarriguren o Ripagaina se ha hecho así. Indican que los carriles bici sin colorear (como sucede en Pamplona) “impiden” a muchas personas “distinguir” entre carril bici, acera bici, acera señalizada (no vía ciclista), ciclocalle, etc., lo que “propicia que haya conflicto entre los distintos agentes implicados en la movilidad”. Además, indican que “está comprobado que los carriles bici que llevan el pavimento pintado son un estímulo favorable para que la gente se anime a circular en bicicleta”, ya que al ser una vía identificable a simple vista pueden sentirse más seguros.
37% potenciales ciclistas. Un estudio de 2005 realizado en Pamplona concluía que el 36% de los ciudadanos se sentían ciclistas potenciales siempre que se acometerían vías ciclistas seguras en la ciudad.
El 77% reclamaba vías ciclistas. Esta primavera, el área de Movilidad realizó una encuesta en la que el 77% reclamaba carriles e infraestructuras ciclistas seguras.
Jesús sukuntza “Queremos animar a los ciclistas a que participen y que miles de bicis se conviertan en miles de mensajes ”
Jesús Sukuntza, de AMTS, precisa que a pesar de que “en la escala de movilidad, la bicicleta figura en segundo lugar”, en las “infraestructuras realizadas en la ciudad somos los últimos y nos sentimos discriminados”. Considera que “la movilidad ciclista sigue siendo la gran asignatura pendiente de Pamplona”, que lleva “17 años de retraso frente a las vecinas Donostia o Gasteiz”.