o es la primera vez que dejo constancia en este periódico sobre la dejadez de los servicios municipales de Iruñea, después de que fuera retirado este pintoresco panel informativo situado a escasos metros de la gasolinera en el alto de Beloso. No podía estar en un lugar más visible para que el ayuntamiento no tuviera excusa alguna de no tener constancia de este “olvido”.

Este panel informativo es lo único que queda del Sendero Urbano inaugurado en junio de 1999 por la alcaldesa Yolanda Barcina, con motivo del 75º aniversario de la Federación Navarra de Deportes de Montaña. Este sendero, diseñado por la citada federación de montaña, unía los siete puentes medievales, desde el puente de Miluze hasta el de la Nogalera, ya en tierras de Burlata. El inicio de este sendero urbano era en la plaza del Ayuntamiento, donde se colocó una placa conmemorativa.

Quisiera destacar que aquella iniciativa fue la primera realizada en una capital del Estado. No era la primera en Europa, ya que existía en París, Gante o Zalburgo, por no citar más. En el casco antiguo se instalaron señales de este sendero, con flechas y medallones en bronce con el escudo de la ciudad. Fue publicado un folleto a color con el recorrido en formato circular, ofreciendo opciones para conocer los aledaños del río Arga, durante todo el trayecto.

Con el paso del tiempo ha quedado de esta iniciativa tan solo este solitario panel informativo, máxime cuando fue asumido por el erario público y lógicamente su mantenimiento. Este símbolo de la dejadez en uno de los lugares más visibles de la ciudad, ridiculiza al propio Ayuntamiento, además de perder una oferta más del turismo en la capital de Navarra.