La suya es una historia de lucha, sin duda. De buscar mejoras para el barrio. De crecer en valores, de tejer redes y de forjar comunidad. Han pasado ya 30 años desde que, en 1992, se creó la Asociación Aldezar para trabajar en el ámbito de la educación comunitaria en el tiempo libre con la infancia y la adolescencia en el Casco Viejo de Iruña. Desde entonces, cientos de educadores y educadoras –muchos de ellos formados en la Escuela Comunitaria de Aldezar– han creado y sostenido una propuesta de educación no formal en la que han participado miles de txikis y adolescentes del barrio.
Tres décadas después, Aldezar sigue siendo un referente en el Casco Viejo, con Auzoenea como epicentro creativo y una fuerte vinculación con la red vecinal y asociativa del barrio. La entidad mantiene su fuerza pese a la importante sacudida que sufrió a finales de 2020, cuando el Ayuntamiento de Pamplona decidió suprimir los convenios que mantenía con las asociaciones infantiles y juveniles de los barrios para la gestión de los Servicios de Atención Preventiva Comunitaria. Pero fue un varapalo que, lejos de superarles, ha conseguido hacerles más fuertes.
Actualmente más de 80 personas participan de forma activa en la organización y desarrollo de las actividades de la asociación, y más de 450 txikis y adolescentes han participado, durante el último curso, en las ludotecas, campamentos, actividades formativas y otras propuestas surgidas desde Aldezar.
Y hoy, sábado, para celebrar el 30 aniversario, Aldezar ha organizado una jornada festiva en Piparrika. El programa de actividades se abrirá con un concurso de tortillas de patatas, a las 10.00. A las 11.00 se creará una cápsula del tiempo antes de salir en kalejira por las calles del barrio. A las 14.00 más de 200 personas se reunirán en una comida popular en la Plaza de San José. Ya por la tarde, después de la sobremesa, la fiesta se trasladará hasta la calle Aldapa, donde habrá música desde las 18.00.
