Ride On no ofrece un seguro de accidentes a los usuarios de las bicicletas, que “aceptan ser responsables de cada uno de los costes en los que se incurra como resultado de la participación en el progama de alquiler de bicicletas”, indica Ride On en su contrato de alquiler. 

En ese mismo documento, la empresa avisa de que el usuario será “responsable” de todos los daños y lesiones. “Usted asume la responsabilidad total y completa de todos los riesgos y peligros. También acepta que Ride On no es responsable de ninguna lesión, daño o coste causado por usted a cualquier persona o propiedad, incluyendo la propia bicicleta”. 

En la misma línea, el abonado reembolsará a Ride On “todos los gastos” que la empresa pague a “cualquier persona con respecto a cualquier accidente, lesión o daño a la propiedad, sea cual sea la causa, que resulte del uso de la bicicleta”, inciden. 

Ride On sigue esta política porque las compañías de seguros no se prestan a hacer seguros de accidentes a terceros ocasionados por las bicicletas públicas”, señalan. Una realidad que Iruña comparte con otras ciudades como A Coruña y Gijón. 

Sin embargo, hay ciudades como Madrid y Barcelona que disponen de seguros de accidentes por daños causados a terceros.

El abono anual del Bicing, el sistema de bicicletas eléctricas del Ayuntamiento de Barcelona, incluye un seguro de responsabilidad civil para los daños materiales y corporales que cualquier abonado pueda provocar a un tercero.

“Los usuarios de Bicing están asegurados de reclamaciones de terceros siempre que cumplan las normas de circulación”, establece la normativa. 

Bicing también pone a disposición de los abonados de una póliza de defensa y reclamación en caso de que sufran un accidente causado por un tercero. La compañía aseguradora ofrece sus servicios jurídicos y el límite contratado es de 3.000 euros por siniestro.

Por último, Bicing cuenta con una póliza de accidentes. Las lesiones se tienen que producir mientras se usa la bicicleta y cubre los gastos sanitarios hasta un máximo de 3.000 euros. 

Las bicletas del Ayuntamiento de Madrid tienen un seguro de responsabilidad civil por “daños causados accidentalmente a terceros por los usuarios”. También cubre los perjuicios generados a los abonados “por fallos o defectos en la bicicleta”. 

En el caso de Bilbao, el ciclista tiene derecho a “disponer de un seguro que cubra las consecuencias económicas de responsabilidad civil derivadas de los daños y perjuicios causados a terceros”.

La cobertura, especifica el Ayuntamiento de Bilbao, será “exclusivamente” en su condición de usuario y “siempre que tales daños se produzcan durante la circulación y uso normal al que están destinadas” las bicis.

En Valladolid, el usuario recibe una indemnización siempre que el accidente se haya producido “a causa de un mal funcionamiento” de las bicicletas.