Hace diez años emprendieron una travesía de destino incierto y esfuerzo garantizado. Tras una dilatada etapa en la hostelería, Juan Ignacio Percaz y su sobrino Aritz Rekalde decidieron que era el momento oportuno para emprender un negocio propio en un mundo que conocían a fondo, para bien o para mal.
Así es como se hicieron con las riendas del bar Toskana de Burlada, un lugar que no les resultaba nada extraño. “Era un establecimiento al que iba con mi mujer y los amigos en calidad de cliente, nos gustaba, y en un momento dado salió la posibilidad de continuar con el negocio si es que se producía un traspaso por parte de los antiguos propietarios” explicó Juan Ignacio, de 52 años, mientras su sobrino y socio, de 37 años, atendía con diligencia a la clientela que se acercaba a la barra o iba llenando la decena de mesas del comedor.
Como sucede habitualmente, el principio no fue sencillo, pero superadas las dificultades iniciales cogieron el impulso suficiente para adquirir en 2018 el local en propiedad. Ya no había marcha atrás.
Comida tradicional
Una década después el bar Toskana sigue conservando las esencias que le han convertido en uno de los locales más populares y un referente de la restauración en Burlada y en la Comarca.
Su plato fuerte es la comida casera tradicional y un buen servicio como cafetería y bar-restaurante, según la hora, lo que les permite estar abiertos para su clientela desde la mañana hasta la tarde-noche.
Ofrece desde desayunos hasta los tradicionales almuerzos de patas de cerdo o menudos o pinchos diversos, confeccionados en la propia cocina del local por las expertas manos de Edurne Luquin y Mery Barrilero, las cocineras, y el apoyo de Brigitte Torres, la camarera.
"Mantenemos la línea de lo que siempre fue el Toskana, pero con el paso del tiempo hemos ido ampliando los menús y la oferta a la clientela"
“Mantenemos la línea de lo que siempre fue el Toskana, pero con el paso del tiempo hemos ido ampliando los menús y la oferta a la clientela, con hamburguesas o bocadillos especiales” comentó Juan Ignacio.
Está ubicado en un buen sitio, en la zona nueva de Burlada, donde existentes varias oficinas y dependencias municipales, lo que le permite contar con una clientela fiel y diversa durante todo el año.
Concierto este miércoles y aperitivo
Organizan conciertos en junio y en fechas señaladas, como el que tendrá lugar este miércoles al cumplirse el décimo aniversario desde que cogieron el bar, con la actuación del Gran Ritxarson y un aperitivo para celebrarlo con los asistentes.
El bar Toskana forma parte de la vida comercial y social de la localidad y como integrantes de la asociación de comerciantes de Burlada y Villava participan en las actividades organizadas.
Les va bien y aunque tienen la opción de ampliar el local consideran que tal y como están la cosa marcha por la dirección correcta. “Ampliar el local nos obligaría a tener una cocina más grande y más personal. Así nos va bien y si algo marcha bien lo mejor es no tocarlo” comentó Percaz.