El Ayuntamiento de Pamplona va a requerir a la UTE Estación de Autobuses de Pamplona / Vectalia S.A que en el plazo de 15 días comience a ejecutar el proyecto para impermeabilizar la estación de autobuses, un proyecto aprobado por el Consistorio en el mes de junio, cuya ejecución cuesta 4,1 millones de euros, y que debería haberse iniciado tras los Sanfermines. La finalidad de las obras es solucionar definitivamente el problema de humedades, filtraciones y goteras que vienen asolando la infraestructura desde al menos 2015.
La Junta de Gobierno Local en su resolución aprobada hoy advierte a la gestora –que también fue la constructora original- de que el incumplimiento de este requerimiento llevará aparejada la imposición de las sanciones administrativas previstas en la concesión para los “incumplimientos muy graves”. Según los pliegos, el Ayuntamiento está facultado incluso a la resolución de la concesión o la imposición de multas de 3.000 euros diarios. Las obras de impermeabilización tienen que estar finalizadas para el 15 de junio y el compromiso es que la infraestructura permanezca abierta. El retraso acumulado en el inicio de los trabajos alcanza ya los cuatro meses.
Una cubierta ajardinada de 14.600 metros cuadrados
La cubierta de la estación, que data de 2007, es una gran lámina verde que se pliega junto con la estructura para reconstruir los elementos defensivos de a Ciudadela, una cubierta ajardinada por parte de los más de 14.600 m2 de pradera que da continuidad a la de la Vuelta del Castillo y que cubre la compleja estructura que forma el volumen interior. El proyecto de impermeabilización, se basa en tres ejes. Por un lado, canalizar el exceso de agua en la pradera, rediseñando la evacuación de aguas por escorrentía mediante dos tubos de drenaje que cruzan de uno a otro lado la parcela diagonalmente. Por otro lado, evitar las filtraciones desde la superficie modificando el sistema de juntas actual (rollos sin sellar / flotantes) por un sistema adherido de láminas de betún modificado SBS, un sistema ya empleado con buenos resultados en otras estructuras enterradas y, finalmente, impermeabilizar el muro existente entre contraescarpa y glacis con nuevas láminas de impermeabilización.
El proyecto cuenta con la autorización de la Institución Príncipe de Viana, permiso preceptivo ya que los elementos fortificados sobre los que hay que actuar son Bien de Interés Cultural y están declarados Monumento Histórico Artístico Nacional.