pamplona - La Audiencia Nacional suspendió ayer la condena del preso de ETA Asier Aginako debido a la enfermedad grave que sufre, según informó ayer la asociación de familiares de presos Etxerat. El preso que salió ayer de la cárcel de Valencia, cumplía una condena de 8 años, por lo que su estancia en prisión debía concluir en 2020, ya que ingresó el 23 de febrero de 2012.
Los abogados del recluso habían pedido la suspensión de la condena para que Aginako reciba “el tratamiento médico que requiere en las mejores condiciones y con las garantías necesarias”, explicó Etxerat. Según la asociación, en la actualidad son 21 los presos de ETA que padecen dolencias graves e incurables y que “el tiempo y las condiciones de vida en prisión agravan sus enfermedades, les impiden superarlas y les llevan a situaciones irreversibles que llegan a suponer una condena a muerte”. Aginako (Durango, Vizcaya) fue detenido en 2004 en una vivienda de Coulaines (Francia). En 2012 fue entregado por Francia y se le imputó un delito de colaboración con ETA y otro de tenencia de explosivos. - Efe