- El Ejecutivo comunitario presentó ayer una agenda antiterrorista para ayudar a los países a anticipar, prevenir, proteger y responder a esa amenaza. Entre otras ideas, plantea reforzar el mandato de la oficina de policía europea (Europol) en su labor contra el terrorismo y la delincuencia organizada.

La propuesta facilitará a la Europol cooperar con las empresas de internet a cuyos servicios a menudo los terroristas recurren para reclutar seguidores, planificar ataques y difundir propaganda y obtener las pruebas pertinentes.

Asimsimo, la Europol podrá actuar como centro de coordinación en caso de que no esté claro qué Estado miembro tiene jurisdicción en los delitos transfronterizos y podrá implicarse en la detección de los yihadistas extranjeros que regresan a sus países de origen. Aunque la agencia de Policía europea recibe información sobre sospechosos y delincuentes por parte de países terceros y de organizaciones internacionales, en estos momentos no puede incluir esos datos en el Sistema de Información Schengen.

Dado que una parte importante de las investigaciones en la UE contra la delincuencia y el terrorismo implican información encriptada, otro de los objetivos de Bruselas es mejorar el acceso a esos datos por parte de las autoridades competentes, respetando a la vez las normas sobre privacidad.

Por otra parte, la Comisión Europea advirtió que es necesario reforzar la seguridad de las infraestructuras críticas, tanto de forma física como digital, frente a amenazas de desastres naturales o provocados por el hombre.

Este año, la Comisión tomó medidas estratégicas para garantizar la seguridad cibernética de las redes 5G, así como para hacer frente a las amenazas transfronterizas para la salud. Bruselas constató que muchos de los ataques terroristas recientes en la UE se dirigieron a lugares densamente poblados o simbólicos.

Entre otras acciones, tiene previsto intensificar su apoyo a las autoridades locales y regionales para proteger los espacios públicos.