La presidenta de la ANC, Elisenda Paluzie, ha dado por hecho este miércoles el "fracaso" de la mesa de diálogo como instrumento para alcanzar un referéndum acordado con el Estado y ha alertado de que esta vía puede acabar siendo una "trampa" que "debilite" al independentismo.

En declaraciones a Catalunya Ràdio, Paluzie ha advertido de los "riesgos" de una mesa que "puede convertirse en un diálogo de sordos" porque, aunque la Generalitat piensa plantear sus reivindicaciones de amnistía y autodeterminación, el Gobierno descarta completamente negociar estos temas.

"¿Cuánto tiempo haremos durar esto?", se ha preguntado Paluzie, que ha alertado de que mientras los independentistas "discuten" sobre la utilidad de esta mesa, el Estado puede utilizarla para "debilitar" al movimiento independentista.

A su juicio, el independentismo no debe caer en la "trampa" de considerar que negociando más competencias, más infraestructuras o una reforma del Código Penal ya es suficiente porque, a su entender, eso son simples "migajas".

La presidenta de la ANC teme que los partidos independentistas dediquen sus esfuerzos a esta mesa de diálogo y no a "pensar en cómo hacer un proceso de independencia para que no acabe como acabó" el de otoño de 2017, con una declaración unilateral que el Govern de entonces fue incapaz de hacer efectiva.

Tras defender la vía unilateral, ha instado a ERC, JxCat y CUP a demostrar "sentido de Estado" y volver a pactar "un plan para poder hacer la independencia", sin que prevalezca la "competencia electoral" entre ellos.

Las fuerzas independentistas, a su entender, deben prepararse para un "proceso de ruptura" y no estar "discutiendo sobre una cosa que tiene escasas posibilidades de éxito" como es la mesa de diálogo.

La manifestación de la Diada que un año más organiza la ANC deberá servir para hacer "presión" a los partidos independentistas para que "vuelvan a tener un plan para hacer la independencia".

Paluzie ha evitado cifrar el número de asistentes que espera para la manifestación de la Diada, ya que a su juicio este año el objetivo es retomar las movilizaciones tras haber pasado el peor momento de la pandemia y "volver a la calle", siendo consciente de que "no se puede pasar de cero a cien de golpe".

Los organizadores recomendarán a los asistentes ir con mascarilla y distribuirse por el espacio en el que transcurra la manifestación para evitar aglomeraciones en puntos concretos.