La red ciudadana Sare ha denunciado, en una manifestación convocada en la localidad vizcaína de Durango las "regresiones de grado" de los presos de ETA, que ha considerado que no supone "justicia, sino venganza", y ha reclamado una política penitenciaria "de carácter ordinario" para los reclusos de la banda.

Tras una pancarta en la que se podía leer "Sin obstáculos en el camino a casa", la movilización ha partido de Landako Gunea y ha contado con una notable representación de EH Bildu.

"El Día Internacional de los Derechos Humanos supone que tenemos que hablar del conjunto de los Derechos Humanos, también de los derechos que afectan a los presos vascos", ha afirmado el portavoz de Sare, Joseba Azkarraga.

Según ha detallado, la manifestación de este sábado, al igual que la que se desarrollará en Bilbao el 7 de enero, "supone la exigencia de una política penitenciaria de carácter ordinario". "Del conjunto de presos vascos en las diferentes cárceles, 110, el 64% podría estar en semilibertad por haber cumplido con creces la mitad de la condena", ha afirmado.

Asimismo, ha advertido que de los 33 presos a los que el Gobierno Vasco ha aprobado su progresión a tercer grado, la Fiscalía de la Audiencia Nacional ha recurrido 23 casos de los que seis han vuelto a prisión y segundo grado penitenciario. "Quedan todavía 13 recursos pendientes de sustanciar. Esto no tienen ningún tipo de lógica", ha añadido.

A la finalización de la marcha, se ha leído un comunicado en el que Sare ha afirmado que "gran parte de la sociedad vasca comparte la necesidad de poner fin a la vulneración de derechos que sufren los presos".

"Estamos consiguiendo poner fin a la política de alejamiento que tanto sufrimiento ha causado y continúa causando en nuestro pueblo.

Y, desde hace un tiempo, nos estamos enfrentando a los sectores más conservadores e intransigentes del Estado español. No solo del ámbito de la política, sino también, del ámbito judicial", ha denunciado.

En este contexto, Sare ha criticado que se utilicen "las togas para imprimir en sus decisiones judiciales una ideología defensora de los postulados políticos de la extrema derecha política". "Vemos cómo presos, tras cumplir más de dos y hasta tres décadas de prisión, consiguen que se les apruebe el tercer grado penitenciario y alcanzar la semilibertad, pero son devueltos a prisión y a segundo grado. Eso no es justicia. Eso es venganza", han añadido.