La localidad navarra de Sangüesa ha homenajeado este jueves a los policías nacionales Bonifacio Martín Hernández y Julián Embid Luna, las últimas víctimas mortales de ETA en Navarra.

El acto, organizado por el Ayuntamiento de la localidad, ha tenido lugar en la Plaza de Santo Domingo, junto al monolito que recuerda a los dos policías nacionales, que murieron el 30 de mayo de 2003 al explotar una bomba lapa colocada por ETA en su vehículo.

Las hijas de los agentes fallecidos Leticia Martín y Ana Embid han asistido al homenaje, en el que se han depositado ramos de flores junto al monolito.

En el acto, junto con las autoridades locales, han participado la delegada del Gobierno en Navarra, Alicia Echeverría, la consejera de Memoria y Convivencia, Ana Ollo, el consejero de Educación, Carlos Gimeno, y el director de Memoria y Convivencia del Gobierno, Martín Zabalza.

También han estado presentes una treintena de miembros de la Policía Nacional, Policía Foral y Guardia Civil, además de familiares de los asesinados, y vecinos y vecinas de la localidad.