Teme por su futuro, no poder afrontar los 290 euros de la habitación de alquiler. Cáritas le ayuda literalmente a comer. Manuel Torres lleva sin cobrar desde julio la prestación que complementa los 426 euros del subsidio para parados mayores de 52 años. A sus 59 años, paga 400 euros del alquiler y vive de los ahorros que le quedan de su vida profesional que acabó hace dos años. Al llevar un año con la renta básica teme que dentro de un año se quede sin nada.

Detrás de una pancarta de denuncia, Ana Celia Durán Céspedes relata que vive en un piso de acogida junto con sus tres hijos a los que cría sola porque su padre "los dejó". Tiene 28 años, llegó hace ocho de Bolivia, el mismo tiempo que permanece irregular, se casó con un autóctono y tuvo trabajos esporádicos como limpiadora. Lleva dos años cobrando la renta básica y necesita que le renueven (la ha solicitado) aunque la nueva normativa se lo pone difícil. Tampoco la dominicana Francia Evangelista, de 35 años, tiene muchas expectativas con esta ley. Percibe el subsidio, 426 euros para poder pagar la guardería y el colegio de sus dos criaturas. Le tocó una VPO en alquiler, pero no puede entrar y vive en una casa de acogida. Tras diez años de residencia y ocho de trabajo, un paréntesis de seis meses -por motivos familiares- en Galicia le interrumpió el empadronamiento, y ahora tendrá que esperar dos años para poder cobrar la renta básica. Tiene dos hijos, uno de ellos con problemas de salud. Las lágrimas se desbordan de sus ojos... "Es injusto que no recorten de lo superfluo....".

las asociaciones Diferentes entidades sociales mostraron ayer frente al Parlamento foral su rechazo a la nueva regulación de la renta básica, que pasa a denominarse renta de inclusión social y que, en su opinión, "no responde a ninguna filosofía de justicia social, sino a un criterio economicista". La concentración fue convocada por Axola (agrupa a profesionales de Servicios Sociales de diferentes administraciones), ODS La Hormiga Atómica, Plataforma Papeles Denontzat, SOS Racismo Navarra y diferentes colectivos que se integran dentro de la Red Navarra de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social. Organizaciones que trabajan en primera línea de atención y que critican las miles de familias que serán "expulsadas" del sistema de renta básica y van a quedar en una situación de "pobreza absoluta", además de denunciar el retraso de cinco meses en la valoración.

Encabezados por una pancarta con el lema Derecho a la renta básica. Defiende los derechos sociales se concentraron frente a la Cámara foral, donde contaron con el apoyo de representantes de formaciones como Nafarroa Bai, Bildu e Izquierda-Ezkerra, y de representantes sindicales. Los miembros de Solidari defendieron ayer un recurso "necesario" para la inclusión social, "que ayuda a cubrir necesidades básicas como el alimento y la vivienda de muchas personas cuando no cuentan con otros recursos". El sindicato estima, además, en unos 40 millones la partida necesaria para 2012 en un momento en que "la actual crisis social y económica está golpeando con singular dureza a muchas personas que se quedan sin empleo y rozan la entrada en franjas de pobreza". También la CGT apuesta en un comunicado por un "reparto justo de los recursos" y del trabajo, y sostiene que las personas y sus necesidades más inmediatas no pueden ser olvidadas por la sociedad.