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"Pamplona tiene 29 juzgados, una ciudad de igual tamaño en Alemania tiene 100"

Es el hombre que preside la Sala de lo Social del TSJN, donde por tanto ve los recursos sobre las sentencias en materia laboral. Cubero es realista ante los crudos datos

"Pamplona tiene 29 juzgados, una ciudad de igual tamaño en Alemania tiene 100"Unai Beroiz

pamplona - El próximo lunes to-man posesión dos nuevas juezas de refuerzo.

-En general, todas las últimas generaciones de jueces que han salido están sin destino y eso es un problema ya estructural. Por lo que sea, los juzgados de Primera Instancia, la primera fase de la Administración de Justicia, están todos cubiertos y los jueces que salen no encuentran plazas y ahí se ha formado un tapón. Además, no se crean plazas. Así que se creó esta figura de los jueces de adscripción territorial, que Navarra no los tenía. Entonces, aprovechando que tenemos un vocal en el CGPJ (Juan Manuel Fernández) supongo que ha hecho una buena gestión a efectos de que se nos adjudique un juez de este tipo. En este caso, nos han enviado dos adjuntos de adscripción territorial.

¿Por qué se han destinado las dos a la jurisdicción social?

-Los números cantan. De acuerdo con las necesidades más perentorias que existen en este territorio a efectos de jurisdicción, se comprobó que los más necesitados de ayuda eran los juzgados de lo Social (encargados de materia laboral). Hay ya desde el año pasado una juez sustituta, porque los cuatro juzgados de lo Social ya no daban más de sí, y se nombró a una persona conocedora de la materia. El Consejo aprobó este refuerzo y se le va prorrogando cada 3 o 6 meses, según sea la pendencia de voluminosa. Ahora, con las dos compañeras que se van a incorporar, veremos si hay que mantener el esfuerzo pero todas las ayudas son buenas. Se trata, en definitiva, de eliminar todo el retraso que hay. Toman posesión a finales de este mes.

Y, sin embargo, los informes estatales del CGPJ ofrece resultados que colocan a Navarra en el mejor lugar en cuanto a asuntos pendientes.

-Todo en esta vida es relativo. En el informe de La Justicia dato a dato Navarra es la que menos pendencia tiene, pero eso es para echarse las manos a la cabeza. Entonces, los demás cómo estarán. No se trata de argumentar que los demás están peor, sino que nosotros tenemos que cumplir con nuestra obligación.

¿A qué se debe aquí el retraso?

-La Constitución consagra la tutela judicial efectiva, que es dar una respuesta en Derecho lo más razonada posible y que sea puntual. Lo que no se puede hacer es que estemos señalando despidos o declaraciones de incapacidad de la Seguridad Social, que la gente lo necesita resolver más que el comer, y se señalen para dentro de un año o más. Me consta que se está señalando con mucha tardanza, pero es que llegamos adonde llegamos. Por eso es el refuerzo de estas compañeras, por ver si con esa ayuda se descongestionan los juzgados. Al hilo de esto, me interesa resaltar que las sentencias de los cuatro juzgados de lo Social, no todas, son recurribles al órgano superior que es la Sala de lo Social del TSJN. No existe en esta jurisdicción la apelación, sino un recurso extraordinario, similar al de casación, donde los motivos y causas para recurrir están tasados en la ley. No se celebran vistas ni pruebas, solo se juzga sobre las pruebas que ya se han practicado en la instancia. La recurribilidad no es tanta.

¿Por qué, entonces, la Sala va bien?

-Si los juzgados tienen esta resolución, la Sala tendría que ir con una pendencia similar. Hay que entender además que la Sala de lo Social está constituida por dos magistrados, que es un contrasentido porque un tribunal será de tres, pero solo estamos el presidente y una magistrada titular. La tercera plaza está sin crear. El tercero que completa el tribunal es un magistrado de la Sala Civil del TSJN. Al terminar 2013 había 31 recursos pendientes. Y en febrero de este año los resolvimos todos, no había ninguno pendiente de 2013. Aun con todo la Sala no va mal. Con esto no quiero decir que seamos más trabajadores que nadie, pero hay otro fondo. La Ley de la jurisdicción social, con respecto al recurso, quiso que este recurso fuera ágil. Son recursos, muchas veces, a sentencias que mueren aquí en el TSJ y esa sentencia crea doctrina autonómica, porque incluso son asuntos propios de la Comunidad Foral. Así que jurídicamente hay que atinar bastante, son sentencias muy elaboradas. Todas las sentencias cuestan.

¿La situación en lo Social se arregla solo con jueces de refuerzo?

-Vamos a un argumento socorrido como es el de la escasez de jueces, en el sentido de que había que crear más órganos. Si estamos integrados en Europa lo estamos con todas las consecuencias y eso también tiene que afectar a la propia Administración de Justicia. Si en Pamplona tenemos 29 juzgados unipersonales, en Alemania existen como mínimo cien juzgados en una ciudad como Pamplona. El argumento es justo. Lo que pasa aquí es que si tenemos capacidad de 100, no puedo rendir como de 1.100. O lo hago a costa de mi salud o forzosamente tiene que haber retraso. Se está dando ese problema de salud entre los compañeros, quien te habla lo ha tenido pero no quiero personalizar.

¿Qué horizonte se avecina con las medidas de refuerzo?

-Si estas dos compañeras tienen una buena adaptación, un periodo de reciclaje y una determinada permanencia, los resultados positivos se verían muy pronto, seguramente a final de año tendríamos resultados más que buenos. Se trata de ir disminuyendo la tardanza en los señalamientos. Reducir el año o año y pico a 8-9 meses para llegar a un tiempo prudencial de 2-3 meses desde que se presenta la demanda hasta que se celebra el juicio. Para mí eso sería lo ideal.

Cuando uno mira hacia los datos de los juzgados de lo Social, ¿qué sensación le queda?

-La sensación que tengo es que los compañeros se están dejando materialmente las pestañas. Son sentencias todas muy bien fundamentadas y razonadas y sinceramente no se de donde sacan el tiempo para llevar ese ritmo de trabajo. La solución clara es crear otro juzgado pero mientras tanto, con estas dos personas de refuerzo, si cogen pronto las claves de la jurisdicción pueden dictar sentencias enseguida y que se alivie el tapón. A un despido o una incapacidad no se puede tardar un año. Se ha dado el hecho fatal de que una persona solicita una incapacidad por unas lesiones graves y que, cuando llega el juicio, esa persona ha fallecido. Imagínate la sensación que se te queda. Tuve hace años un caso en el que concedí la incapacidad absoluta en primera instancia y luego se recurrió, se revocó dicha sentencia en el sentido de que no estaba incapacitada esa persona, y cuando se comunicó este fallo, la persona había fallecido.

Les toca resolver sobre auténticas cuestiones básicas.

Nos encontramos muchas situaciones críticas. Una pensión de jubilación en el que la empresa le ha cotizado extemporáneamente o ha habido una infracotización, y esa persona pensaba que iba a cobrar una cosa y cobra la mitad. Son cosas de primerísima necesidad, tienen el carácter de pensiones alimenticias. Creo que, después del médico, que tiene en sus manos lo más preciado que es la salud, vamos los jueces, que decidimos sobre la libertad y el patrimonio.

Y si no llega a haber estos refuerzos.

-Como estamos en crisis y la litigiosidad aumenta, de no haber dotado estas medidas, esto habría sido un colapso total. Hay que poner los medios antes y que estamos todos implicados. Si los juzgados van bien, lo notaremos todos en la economía.