Síguenos en redes sociales:

Penas de cárcel a tres jóvenes por atentado en el "encierro de la villavesa" de 2012

Los hechos tuvieron lugar cuando un grupo de personas comenzó a increpar a los agentes que formaban parte del dispositivo policial establecido para evitar que se cortara el tráfico

Penas de cárcel a tres jóvenes por atentado en el "encierro de la villavesa" de 2012Javier Bergasa

PAMPLONA. El Juzgado de lo Penal número 2 de Pamplona ha condenado a penas de entre nueve meses y dos años de prisión a cuatro acusados de participar en incidentes registrados en el encierro de la villavesa el 15 de julio de 2012.

En concreto, el acusado U.C.N. ha sido condenado, por un delito de atentado en concurso ideal con una falta de lesiones, a 2 años de prisión y a indemnizar a un agente de la Policía Nacional con 152,30 euros.

Por su parte, A.T.E. ha sido condenado a un año de prisión por un delito de atentado e I.M.A.P. a nueve meses de cárcel por el mismo delito con las atenuantes de embriaguez y reparación del daño. Finalmente, R.O.L. ha sido condenado a una multa de 240 euros por una falta contra el orden público. Un quinto acusado ha sido absuelto. Contra la sentencia cabe recurso.

A los condenados I.M.A.P. y A.T.E. se les concede la suspensión de la ejecución de la pena impuesta, condicionada a la no comisión de nuevos delitos en un plazo de 2 años.

Según los hechos probados que relata la sentencia, en la mañana del día 15 de julio de 2012 la Policía Municipal de Pamplona estableció en la confluencia de la calle Estafeta con la travesía Espoz y Mina un dispositivo de seguridad para impedir que los participantes en el conocido como encierro de la villavesa accedieran a la cuesta de Labrit y "cortaran el tráfico, como había ocurrido en años anteriores".

Sobre las 8 horas unas 600 personas procedentes de la calle Mercaderes se detuvieron ante el cordón policial, y unos 15 minutos después "comenzaron a increpar a los agentes y a lanzarles todo tipo de objetos contundentes (botellas, vasos, latas)".

En ese contexto, la sentencia expone que el acusado R.O.L., "que se encontraba en primera línea del grupo de alborotadores, comenzó a gritar 'vamos a pasar', animando a la gente a rebasar el cordón policial, a la par que golpeaba repetidamente con el pie el escudo de uno de los funcionarios".

Según añade la sentencia, "ante el cariz de los acontecimientos, la Policía Municipal y una dotación de la Policía Nacional que efectuaba labores de apoyo a los primeros acordaron efectuar una carga para dispersar a los concentrados".

Minutos después, el acusado I.M.A.P., que se encontraba con un grupo de personas en la confluencia de la Bajada de Javier con la calle San Agustín, arrojó una botella de cerveza a un agente de la Policía Nacional que pudo esquivarla. "A continuación emprendió la huida hacia la cuesta de Labrit, recogiendo a su paso todo tipo de objetos contundentes y arrojándolos hacia los agentes que iban tras él", añade la sentencia.

Fue alcanzado en la calle Tejería, "viéndose obligados los funcionarios a utilizar la fuerza mínima indispensable para practicar su detención, llegando a rodar por el suelo con él, ante sus intentos de marcharse".

Sobre las 8.30 horas la Policía Nacional efectuó una nueva carga en la calle San Agustín, para dispersar a un grupo de personas que les insultaban y lanzaban objetos.

Cuando un agente avanzaba por dicha calle, el también acusado U.C.N., que estaba refugiado en un portal, le lanzó una botella de vidrio de un litro, que impactó en su hombro derecho, "ocasionándole una contusión de la que tardó en curar cinco días, sin necesidad más que de una asistencia facultativa".

A esa misma hora, en la Plaza del Castillo, el también acusado A.T.E. lanzó contra los agentes de policía desplegados en la zona varias botellas de vidrio y piedras, según recoge la sentencia.