El Juzgado de Azpeitia ha sobreseído de manera provisional la querella presentada en 2014 por la Diputación de Gipuzkoa, bajo el mandado de Bildu, por malversación de fondos públicos y falsificación de documentos relacionados con la construcción de la autopista AP-1, en su tramo entre Arlaban y Eskoriatza. En concreto, la institución foral, gestionada entonces por Martin Garitano, se querelló contra el director de la citada obra, el representante del contratista UTE Arlaban y el entonces director técnico de Bidegi, a quienes acusó de un presunto fraude que, según la coalición abertzale, ascendía a 17 millones de euros. Tanto la Fiscalía como la propia Diputación habían solicitado ya el sobreseimiento de esta causa, que se sostenía únicamente por la acusación particular, formada por los exjunteros de Bildu Iban Asenjo, Judit Garcia, Inko Iriarte y Jon Albizu.

"Este sobreseimiento supone un refrendo al buen nombre y a la integridad de la Diputación foral de Gipuzkoa, de Bidegi y de las personas que fueron tan injustamente tratadas y señaladas por esta querella", ha valorado la diputada general, Eider Mendoza, que ha pedido a EH Bildu que "abandone esta forma de hacer política", ya que actúa directamente "contra la honorabilidad de las personas y la credibilidad de las instituciones". Asimismo, ha señalado que el auto supone un "descrédito" para quienes "no tuvieron ningún reparo a la hora de menoscabar a las instituciones guipuzcoanas valiéndose de datos erróneos y omisiones con el objeto de dañar a un rival político".

En una valoración de urgencia, en la que Mendoza ha querido mantenerse "prudente", ya que el sobreseimiento es todavía provisional y se puede presentar recurso de apelación en un plazo de cinco días desde su notificación, ha recalcado que el auto del juez recoge que el informe en el que se basaba la querella está plagado de "innumerables deficiencias, errores y omisiones que invalidan todas y cada una de las conclusiones establecidas". "Este primer auto establece con absoluta claridad, por un lado, la inexistencia ni siquiera de indicios constitutivos de delito y, por otro, los llamativos errores y omisiones existentes en la documentación presentada junto con la querella", ha subrayado. "La extensa documental obrante en las actuaciones con las declaraciones testificales y periciales practicadas no ha hecho sino poner de manifiesto las numerosas incongruencias que presentaba el informe pericial presentado junto con las querellas origen de las presentes actuaciones", ha añadido.

Así las cosas, Mendoza ha aprovechado para "reivindicar el buen nombre y la integridad" de las instituciones guipuzcoanas, "así como de todas las personas trabajadoras, funcionarias y representantes públicos que en su día se vieron salpicados por esta querella injusta e infundada que solamente perseguía fines partidistas".

"Nos reafirmamos en los valores de integridad, honestidad y transparencia que deben regir la Diputación Foral de Gipuzkoa. Es nuestro compromiso y así seguirá siéndolo en el futuro", ha concluido.