Trabajadoras del Consejo de la Juventud de Navarra (CJN) criticaron ayer el “abandono” en la que la Comisión Permamente mantiene a la entidad y han afirmado que “la situación que vive el organismo es agónica e insostenible”. En un comunicado, dicen estas trabajadoras que intentaron “por todos los medios, pero en vano, buscar la implicación de la Comisión Permanente para buscar soluciones”. El pasado mes de marzo, Alejandro López Orejuela asumió el cargo de presidente del Consejo “alegando que dotaría al CJN de estabilidad, tranquilidad y trabajo. Nada más lejos de la realidad, la situación ha ido a peor en todos los aspectos debido a la dejadez de funciones de su figura y de la del resto de la Comisión Permanente”, aseguraron.
Las trabajadoras señalaron haber sufrido a lo largo de estos meses un “abandono por parte de los responsables del organismo, encabezado por López, habiendo tenido únicamente cuatro reuniones de coordinación, siendo la última el 5 de junio”. “El resto de comunicaciones se han limitado al correo electrónico o a mensajería instantánea y en la mayoría de las ocasiones dichas interpelaciones se han quedado sin respuesta. Tanto es así, que la cuenta de Whatsapp del número que tiene la presidencia del CJN ha sido desactivada automáticamente por la aplicación por falta de uso”.
Por su parte, el propio presidente del Consejo de la Juventud de Navarra (CJN), Alejandro López, afirmó ayer en el Parlamento que “está cumplida su labor” en el cargo, aunque admitió que la situación del Consejo es “preocupante” pero que “hoy no está ni peor que hace nueve meses ni peor que hace tres años, sigue estando en la misma situación”. Del mismo modo, reconoció que hay “falta de pluralidad y de participación” en el Consejo, pero indicó que es algo que se ha dado “en el último año y en los últimos cinco”. “No hemos instrumentalizado el Consejo de la Juventud”, dijo.
