Cortita y al pie. Un destino bonito, en la bota de Italia, en el corazón de la Puglia, y al lado de casa. El aeropuerto de Noáin se ha convertido en una apuesta segura para todos los navarros que, en estas vacaciones de Semana Santa, quieren probar destinos diferentes a los que ofrece el propio aeropuerto durante el año. Las colas para facturar el equipaje para el chárter con destino Bari llegaban hasta la puerta de entrada dos horas antes del vuelo. 

El avión salió este miércoles hacia tierras italianas a las seis horas de la tarde repleto de familias y grupos de amigos dispuestos a disfrutar de un poco más de sol y a despejarse del trajín diario del trabajo y los quehaceres. Sin embargo, aunque las previsiones del tiempo sean favorables en la bota de Italia, la climatología en Semana Santa bien es sabido que puede alterar cualquier predicción. Las maletas de los navarros, de manera precavida, viajaron tanto con pantalones cortos como con ropa abrigada, esperándose cualquier cosa. 

Ana y Jon, madre e hijo, llevan de todo en su equipaje. “Yo llevo calzado tanto por si hace bueno como por si hace malo, en estas fechas no te puedes fiar”, ríe la madre. “La mayoría de mi ropa es de largo, pero también llevo pantalones cortos por si pega el sol y tenemos calor”, añade Jon. Ana, que ya está jubilada, y Jon, que sigue estudiando y estos días no tiene que ir a clase, han encontrado su viaje familiar en estas fechas.

Cuadrar fechas, ardua tarea

No siempre es fácil cuadrar las fechas de todos los familiares para viajar. Muchas de las familias llevan años sin coincidir todos, pero hay fechas elegidas a las que no se puede fallar. La familia Urbasa Arbeloa ha conseguido juntar a toda la familia para celebrar los 35 años de casados de los patriarcas. “Hace años que volamos en pareja en Semana Santa, pero esta es la primera vez que juntamos a toda la familia en un viaje al extranjero”, admite con ilusión Maribel Arbeloa Roch, madre que celebra casi cuatro décadas de matrimonio.

“Son buenas fechas para nosotros. Somos farmacéuticos, autónomos, y en verano y en otras fechas festivas nos es más difícil escaparnos. Estos pocos días cerramos la farmacia y tenemos la calma de poder irnos por ahí, aunque sea unos días”, asegura. “Vamos buscando el buen tiempo, por lo menos mejor que aquí”, ríe Patricia Urbasa Arbeloa, una de las hijas. “Lo bueno de estos viajes es que podemos hacerlos toda la familia y desde casa. Es mucho más cómodo viajar desde Pamplona que tener que moverse a otros aeropuertos”, añade.

Manolo e Íñigo son padre e hijo. Han sido, desde siempre, unos apasionados de Italia. “Hemos estado varias veces en Italia, nos gusta mucho, pero es la primera vez que viajamos a la zona de la Puglia, y hemos decidido visitarlo”, apunta Manolo. “Otro de los factores para elegir Bari fue que a los demás destinos que se han organizado para esta Semana Santa, a Munich, Estambul y Roma, ya hemos viajado varias veces”, añade.

Aún así, la Semana Santa no siempre han sido las fechas para irse de vacaciones para la familia. “El año pasado nos enteramos de que existía esta oferta de vuelos al extranjero en estas fechas, y este año hemos decidido hacerlas ahora”, relata Íñigo. Como las demás familias que viajaban a Italia, precavidos con la ropa. “De tejido gordo no llevamos nada, pero chubasquero y paraguas si”, ríe el hijo. “Parece que va a hacer bueno así que esperemos no decir lo contrario a la vuelta”, coinciden los dos.

El 21 de abril será el vuelo de vuelta. Vuelta a la realidad después de unos días de descanso lejos de la rutina. Poniéndonos en lo peor, en las lluvias torrenciales todos los días y en vientos huracanados, aún así, seguro que las familias navarras disfrutan de unos días en buena compañía. De todas formas, esperemos que no sea así. Que el sol les sonría y puedan disfrutar del buen tiempo y del azul del Mar Adriático. Buon viaggio e buon ritorno a tutti.