11.000 estudiantes comienzan este miércoles las clases en la Universidad Pública de Navarra (UPNA). Una cifra que ha ido en aumento en el último lustro, alcanzando la cifra de matriculados más alta, aún sin que esté cerrado el plazo de inscripción, en este recién iniciado curso 25/26. En la campaña 19/20, 8.466 estudiantes se matricularon en la UPNA, y desde entonces, el número de matriculados ha ido en constante aumento: 8.863 en el curso 20/21, 9.218 en el 21/22, 9.674 en el 22/23, 10.205 en el 23/24 y 10.700 en el pasado curso, 24/25.
El pasado martes, día previo al inicio de las clases, la universidad organizó un acto de bienvenida para los 2.290 estudiantes que inician su andadura en la UPNA, en los dos campus de Arrosadia y Tudela. A primera hora de la mañana, los nuevos alumnos tuvieron una presentación realizada por docentes de la titulación que han elegido. Tras la presentación, se les explicaron cuestiones de utilidad para la etapa que inician como el Programa de Mentoría, la plataforma o portal de estudio MiAulario y la Biblioteca. Además, la universidad colocó una carpa informativa en la que, en diferentes puestos, actuales alumnos de las diferentes grados ofertados, dieron pinceladas a los nuevos estudiantes de lo que será estudiar la carrera elegida. Asimismo, asociaciones navarras y el Euskara Taldea de la UPNA han podido mostrar su trabajo y acercarse al nuevo alumnado.
En el acto de bienvenida del nuevo alumnado, participaron el vicerrector de Enseñanzas, Javier Goicoechea, y la vicerrectora de Estudiantes y Vida Universitaria, Ainhoa Pérez. “La etapa universitaria son cuatro años muy intensos de muchos estímulos, y en esta carpa les damos la oportunidad de que alumnos actuales les den orientación académica, psicológica y de ocio”, señaló la vicerrectora. “También damos cabida a asociaciones y consejos escolares, que son otra parte de nuestra vida universitaria, para que todas las recomendaciones y opiniones queden representadas siempre”, añadió.
Ante la duda de si la reforma de la facultad de Medicina podrá estar operativa a partir de la fecha que estaba prevista (noviembre), Goicoechea aseguró que “así será y que los plazos de las obras van conforme se dijo que iban a ir”. “Nuestra intención era que los alumnos del grado de Psicología se añadieran a las carreras relacionadas con la salud que ya cursan sus lecciones en la facultad de Barañain. Sin embargo, nos dimos cuenta de que muchos de ellos viven cerca del campus de Arrosadia y que ese cambio afectaría a muchas familias. Por tanto hemos decidido que sea a partir del curso que viene, el 26/27, tomen las clases en el edificio de Ciencias de la Salud en lugar de donde las toman hoy en día, en el campus de Arrosadia”, explicó el vicerrector.
En la segunda quincena de septiembre, del 15 al 18 y del 22 al 23, se realizará una jornada con los padres y madres de manera telemática. Dicha jornada consistirá en una charla informativa con el objetivo de promover la imagen de la universidad y potenciar así su carácter de referente en la sociedad navarra, tal y como lo recoge en sus planes estratégicos.
Nuevas amistades y nervios del primer día
El zamorano Millán Álvarez, el vizcaíno Josu Martínez de Azagra y el toledano Álex Cuesta ya han formado una cuadrilla el primer día. Les une la Ingeniería Biomédica, aunque Josu lo ha combinado con el grado de Telecomunicaciones. Todavía no hay lugar a bromas ni a muchas risas porque es el primer día y no se conocen mucho. Pero se nota que los tres amigos han hecho migas y que, si todo va bien, saldrán de la universidad juntos y con un título bajo el brazo.
“Tengo muchas ganas de conocer cómo es la vida universitaria: los jueves universitarios, la carpa... Creo que me lo voy a pasar muy bien” augura el zamorano. Josu y Álex muestran algo más de prudencia debido a la intensidad y esfuerzo que les va a imprimir la carrera. “Nos han dicho que es exigente y difícil, pero que con una buena organización, se puede sacar adelante. Al final, si otra gente lo ha hecho nosotros no seremos menos”, afirma Álex. “Lo primero es estudiar y hay que saber dosificarse para sacar bien la carrera, pero también hay que saber disfrutar de uno de los mejores momentos de la vida, según nos han contado”, ríe Josu.
Los tres amigos, de otras comunidades autónomas, no acabaron en Navarra de cualquier forma. “Yo quise entrar en la Universidad de Valladolid pero la nota de corte era muy alta. Aún así, yo practico piragüismo y quería seguir practicándolo así que el lugar que más cerca me quedaba de casa era Navarra, así que aquí estoy”, señala Millán.
En Josu, los sentimientos de amor a la tierra y el fútbol le han hecho decantarse por la Comunidad Foral. “Mi aita es de aquí, de Navarra, así que para mí es fácil venir a la UPNA, es como estar en casa”, ríe el vizcaíno. “Además, Osasuna también tira, me gusta mucho el equipo y el ambiente del Sadar”, añade.
Álex tuvo algún que otro problema con los trámites de inscripción en otras universidades. “La fastidié en la preinscripción. No tenía ni idea de cómo funcionaba ese asunto y pensé que me iban a ceptar en todos y en orden de preferencia elegiría yo, pero no fue así. Al final, como en la UPNA era donde mejor había hecho la inscripción, me vine aquí”, explica.
Alumnado internacional
La UPNA tiene acuerdos de movilidad con más de 300 instituciones de medio centenar de países. Gracias a esos acuerdos, los estudiantes van a estudiar fuera y otros estudiantes vienen aquí, bien a estudiar un semestre o bien a realizar el curso completo.
En este semestre de otoño se van a incorporar 189 estudiantes extranjeros de grado (vienen 166 a realizar un semestre y otros 23, a realizar el curso completo). Los países que aportan más estudiantes son Italia, México, Francia, Perú y Chile. Los programas de movilidad son Erasmus +, ISEP, Martín de Rada (Asia) y Palafox (México). También hay algunos convenios bilaterales.
La llegada del alumnado extranjero se produce de manera escalonada, en dos fechas: el 26 de agosto y el 2 de septiembre. Se les enseñan las instalaciones, los servicios, etc. y pueden acogerse al programa “buddy” (colega) en el que un compañero o compañera de la UPNA les ayuda a “aterrizar” en la universidad (contamos con cerca de 30 personas voluntarias para acompañar). También se les ofrece la posibilidad de realizar un curso intensivo de español.
Además del alumnado internacional, este semestre vienen otra treintena de estudiantes procedentes de otras universidades españolas para realizar una movilidad con el programa SENECA-SICUE. Además de los actos de bienvenida de los nuevos alumnos y de los padres y madres, el viernes, el catedrático de Historia e Instituciones Económicas Joseba de la Torre. inaugurará oficialmente el curso académico. Está previsto que, durante el curso se hagan homenajes al profesorado y posibles nuevas tomas de posesión