El incendio registrado en febrero de 2021 en Bera y que calcinó casi 1.400 hectáreas (672,5 en Navarra, 277,5 en Gipuzkoa y 430,87 en Francia) quedará impune. A pesar de la investigación llevada a cabo por la Policía Foral durante meses, la cual concluyó con la identificación de un ciudadano francés como supuesto autor del fuego, el Juzgado de Instrucción número 5 de Pamplona ha dictaminado el archivo del caso por considerar que no está suficientemente acreditada la imputación.
Las pesquisas policiales, llevadas a cabo por el Grupo de Investigación Medioambiental de Policía Foral, contaron con la colaboración de la Ertzaintza y de la Gendarmería francesa, a través del Centro de Cooperación Policial y Aduanera (CCPA) de Hendaia. Además, en el ámbito judicial supuso la cooperación del Juzgado de Instrucción número 5 de Pamplona con la Fiscalía de Bayona.
Las IOTP (inspecciones oculares técnico policiales) realizadas, junto con la colaboración ciudadana aportando fotografías de los primeros momentos del incendio, permitieron confirmar que se trató de un incendio intencionado, con dos puntos de inicio -distantes 647 metros- unidos por una carretera, ha explicado la Policía Foral.
Las manifestaciones de testigos y el análisis de las cámaras de seguridad y del tráfico de comunicaciones telefónicas permitieron a los policías forales investigadores identificar a un ciudadano francés –con antecedentes judiciales en España y actualmente cumpliendo condena en Francia por otros delitos– como sospechoso de haber sido el autor del incendio. Fruto de ello, por parte de la jueza instructora, se le tomó declaración en calidad de investigado.
En su auto, la jueza instructora agradece el esfuerzo realizado por la Policía Foral en la investigación de este incendio, destacó ayer el Cuerpo autonómico.
