Las redadas regresan al Tour de Francia. Unos 25 miembros de la policía francesa adscritos a la Oficina Central de la Lucha contra los Ataques Ambientales y la Salud Pública (OCLASEP) irrumpió a última hora del miércoles en el hotel que ocupaba el Bahrain en el Tour. Los agentes buscaban información y sustancias prohibidas. El registro, que se centró en las habitaciones de los corredores y en el autobús del equipo, duró una hora aunque otras voces apuntan a que el registro llevo más de tres horas. Ningún miembro del staff o del equipo fue detenido después de los registros realizados.

El manager del Bahrain, Milan Erzen, explicó en Cyclingnews lo sucedido. “No dijeron la razón de la visita, nos molestaron durante una hora y se marcharon”. Erzen expuso que “se llevaron los archivos de entrenamiento de los corredores” durante el registro y dijo que pondrá el caso en manos de los abogados de la formación. El equipo, que se ha anotado dos victorias de etapa en lo que va de Tour con Mohoric en Le Creusot y Dylan Teuns en Le Grand Bornand, continúa en carrera y tomará la salida en la etapa de este jueves. Pello Bilbao es el mejor situado en la general, donde ocupa el noveno puesto. "No es plato de buen gusto lo que vivimos, pero es parte de lo que heredamos de otros tiempos. Es triste las dudas que hay de nuestras victorias", expuso tras la etapa el gernikarra.

La actuación realizada en la noche del miércoles se enmarca en una "investigación preliminar" abierta por la Fiscalía de Marsella, que investigaba la presunta "adquisición, transporte, posesión o importación de una sustancia o método prohibido para su uso sin justificación médica por parte de deportistas.La investigación se centra en determinar la realidad o no de las infracciones que justificaron su apertura. La existencia de la investigación no presupone en absoluto la existencia de infracciones penales", apuntaron desde la Fiscalía de Marsella a través de un comunicado.

Los registros al Bahrain llegan después de que 'Le Parisien' publicara hace un mes las acusaciones de dos directores, que se ampararon en el anonimato, para dar su opinión durante el Dauphiné. "¿Cómo voy a reunirme con los patrocinadores y decirles que no hay más dopaje cuando veamos esto? El Bahrain se está volviendo cada vez más escandaloso", apuntó uno de ellos. "Todos nos sentimos idiotas. Hay una sensación de impunidad que nos recuerda a los sucios años 2000. Pero, obviamente, mientras no tengas pruebas, te quedas callado", subrayaba otra de las voces.