Navarra registró 738 sociedades mercantiles constituidas el año pasado, una cifra que se aproxima a las contabilizadas en 2019 –antes de la pandemia–, con 785, según el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Sin embargo, en 2022 se produjo un descenso de casi el 16% respecto a 2021, una bajada que coincide con un escenario convulso internacional que repercute en las economías locales, con un incremento del coste de la energía y de las materias primas, un problema de distribución de la cadena logística y una espiral de subida de los precios, con una inflación que el Banco Central Europea pretende atajar con un aumento de los tipos de interés. España también sufrió un descenso de sociedades mercantiles, con 99.069 fundadas en 2022, un 2,1% menos que un año antes.
¿Cuánto dinero necesitan?
El capital suscrito para la constitución de las 738 empresas ascendió a 41,577 millones de euros, lo que supone una media de 56.337,3 euros por sociedad mercantil. Este desembolso es inferior al realizado en 2021 y 2019: por cada sociedad mercantil constituida se destinó una media de 69.912 euros en 2021; y previo a la pandemia, se invirtieron 108.647 euros por cada empresa registrada.
El Gobierno de Navarra y los agentes económicos, sociales, académicos y de otros ámbitos trabajan en la configuración de un ecosistema de valor en los sectores estratégicos de la Comunidad Foral para atraer y mantener talento y favorecer un clima adecuado para la implantación de empresas en los diferentes sectores. La Estrategia de Especialización Inteligente y Sostenible (S4) contempla seis: movilidad eléctrica y conectada; alimentación saludable y sostenible; industria de la energía verde; medicina personalizada; industria audiovisual; y turismo sostenible.
Un ecosistema propicio
Las 738 nuevas empresas se distribuyen en alguna de estas actividades o en subsectores que cuelgan de ellas. El consejero de Desarrollo Económico y Empresarial, Mikel Irujo, ha señalado en más de una ocasión que la Comunidad Foral debe ofrecer las mejores condiciones para que los emprendedores y emprendedoras se queden en nuestro territorio.
Entre las medidas, se citan incentivos dirigidos a la transición ecológica y digital; una economía circular en línea con los objetivos de la UE; una fiscalidad acorde con los objetivos de las empresas; ayudas públicas que potencian la colaboración entre las empresas en proyectos diversos para impulsar la competitividad; o unos servicios de calidad. Desde 2008, Navarra se posiciona como la comunidad con mayor calidad de vida de España. Así lo revela el Indicador Multidimensional de Calidad de Vida, en el que la Comunidad ocupa un puesto de vanguardia respecto al resto de territorios en áreas como medio ambiente, condiciones materiales de vida, trabajo, salud y educación.
Una caída del 16%
El descenso de casi un 16% de sociedades mercantiles constituidas el año pasado puede explicarse por el complicado contexto económico, con una subida de tipos que dificulta la financiación, y por el buen comportamiento de 2021, en el que se contabilizaron 877 nuevas empresas, algunas de ellas fundadas ese año al no poder hacerlo en 2020 debido a que la pandemia del coronavirus paralizó de manera drástica la economía mundial. Sí es verdad que la media de constitución de empresas en Navarra la última década se mueve en las 820. Así que la Comunidad Foral tiene que seguir trabajando para volver a esos niveles.En 2014 y 2012 se superaron las 900 constituidas en un solo año.
Dato positivo en enero de 2023
Como dato positivo nuestro territorio ha comenzado 2023 con un registro de sociedades mercantiles que no se producía desde hace cinco años en enero. El primer mes del año contabilizó 93 nuevas empresas –cifra similar a 2018–, con un capital medio de 15.580 euros. Estas 93 suponen un 22,3% más que en el mismo periodo del año anterior.
Por su parte, el número de organizaciones disueltas en 2022 ascendió a 91 en Navarra, cifra semejante a 2019 –antes de la pandemia–, con 84; y más que en 2021, cuando se contabilizaron 55.
