El mal tiempo de la pasada Semana Santa ha afectado al sector del turismo rural, ha asegurado la presidenta de la Federación Navarra de Turismo Rural, María Ángeles Ezker, quien ha destacado que, si bien todavía no hay datos, "la impresión es que ha habido menos ocupación de la prevista".
"Normalmente Semana Santa es una semana de mucho trabajo y este año, por el tiempo, no ha sido así, no ha acompañado nada y se ha notado en la ocupación de alojamientos", ha señalado a EFE.
En Semana Santa, ha declarado, ha habido muchas anulaciones de reservas y algún alojamiento se ha quedado vacío, mientras que otros "ha costado llenarlos", al contrario de lo que ha ocurrido en años con mejores previsiones meteorológicas.
Ezker, profesora de esquí durante el invierno en el Roncal, ha asegurado que, desde este punto de vista, los últimos meses también han sido "un desastre".
El turismo de esquí de fondo, ha dicho, "es un atractivo siempre y cuando haya nieve", pero este invierno ha sido "muy difícil, ha estado mal", ya que "empezó un poquito bien, pero luego no ha nevado". En este momento, "tenemos bastante nieve, pero ya se están cerrando las estaciones", ha lamentado.
Esta situación, ha explicado, se ha notado sobre todo en febrero, "que es el mes de más movimiento con el tema de la nieve", porque enero, después de las Navidades, "la gente no sale con tanta alegría".
"Ha fallado el puente de diciembre, ha fallado Navidades, ha fallado el puente de carnavales y ahora ha fallado la Semana Santa", ha comentado.
Tras indicar que ha sido "un año desastroso" para el turismo rural, Ezker ha confiado en el verano, porque "la verdad es que ha sido un invierno de olvidar".
